Pedro Sánchez ha recordado este martes, tras su reunión conFelipe VI, que hace tres años, cuando fue elegido por vez primera como secretario general del PSOE, pidió a Mariano Rajoy que diera una “solución política” ante el aumento del independentismo en Cataluña. En aquel entonces estaba convocada la consulta popular del 9 de noviembre. Ahora el referéndum, en principio vinculante, del próximo 1 de octubre.

“No es aceptable que tres años después estemos en una situación igual que entonces. Eso significa que si es igual, es peor. Ya va siendo hora de que pongamos encima de la mesa una solución política. Si Rajoy da el paso, el PSOE estará con el Gobierno. Yo lo daría”, ha señalado Sánchez en su primera rueda de prensa tras su amplia victoria en las primarias socialistas del pasado mayo.

El líder de la oposición ha visto al Rey “preocupado, como no podía ser de otra manera” por el conflicto en Catalunya. La cita con el jefe del Estado, que ha durado cerca de dos horas, ha tenido lugar al mismo tiempo que los diputados de Junts pel Sí y la CUP presentaran en el Parlament la ley del referéndum, donde se contempla una declaración de independencia en 48 horas si gana el ‘sí’ el 1 de octubre.

"ILEGAL Y SIN GARANTÍAS"

“El referéndum es ilegal y no tiene ninguna garantía. Pero la pregunta es: ¿Está dispuesto Rajoy a dar un paso para una solución política en Cataluña? El PSOE va a estar siempre del lado de la legalidad y la Constitución. Nuestra posición es la misma que hace unos años. ¿Pero dónde está la solución política? Lo importante es que Rajoy no solo se quede en la legalidad, sino que dé un paso para dar una salida política al conflicto”, ha explicado Sánchez, que se reunirá el próximo jueves con Rajoy en la Moncloa. Sánchez cree que de esa cita pueden salir acuerdos en cuatro materias: “Cataluña, pacto antiyihadista, estrategia de seguridad nacional y lucha contra el cambio climático”.

La vía de Sánchez ante el conflicto catalán pasa por una reforma constitucional que “profundice en el carácter plurinacional” del Estado, algo que ha defendido este martes ante Felipe VI. “Le he trasladado la necesidad de un proyecto de renovación nacional”, ha explicado. Pero, como ha concluido poco después, no es el jefe del Estado “quien debe impulsar estas soluciones políticas”. Es el presidente del Gobierno.