Después de meterse en la piel y bordar las imitaciones de tantos y tan variopintos personajes (por algo ganó 'Tu cara me suena'), Roko se ha "quitado los disfraces", dice, para reencontrarse consigo misma y publicar el disco '3 2 1: Roko'. Una cuenta atrás artística. Y vital. Y lo ha hecho de la mano del productor que mejor la conoce, Antonio Ferrara. "Somos amigos desde que con 8 añitos jugábamos a hacer música", recuerda la artista jienense, que llegó a acabar los estudios de Arte Dramático y figurar en la escudería de la compañía Teatro Lírico Andaluz de Málaga antes de probar fortuna en la televisión: participó en el talentshow 'El número uno' y en la serie 'Vive cantando'.

Rocío Pérez Armenteros (su nombre real) sabía que necesitaba a un cómplice que la entendiera bien. A todos los niveles. Que supiera encontrar su "voz propia". "Lo más puro de ella misma", asiente el productor, que le arropa tocando la guitarra en el acústico que graban para EL PERIÓDICO. "Roko se entrega tanto, tiene tal capacidad interpretativa, que me he sentido como un modisto al que le ponen a la mejor modelo para hacerle un traje- relata Ferrara-. Pero antes había que desnudarla. Su habilidad para imitar voces y gestos es exagerada. Pero la conozco tanto, que sabía cómo desenterrar estas capas. Hemos trabajado duro. Y ha conseguido afinar mucho", añade un músico que lleva años trabajando como compositor. Suyos son algunos éxitos de Malú ('Como una flor' y 'Duele'), Sergio Dalma ('Fuego en el alma') y Pastora Soler ('Qué pequeña soy yo' y 'Por si volvieras'), entre otros. Y en '3, 2, 1', firma varias piezas, si bien muchas son de la propia Roko.

Letras de su autoría

"Quería que la gente me viera tal cual soy. Y cantar algunas de mis propias letras, y en mi propio lenguaje: pop, funky, swing... Descartando la vena más latina que me adjudicaron y que quizás hubiera resultado más comercial, un término que no va con nosotros", aclara Roko. El proceso de selección del repertorio les ha llevado "más de cuatro años". Y entre las piezas, hay algunas que Roko escribió "con 15 o 16 años", puestas al día. Como "la motivadora y vitalista" 'No voy a esperar', que canta a dúo con el rapero El Chojin.

En los créditos de '3, 2, 1' aún hay otro nombre a destacar: Antonio Martínez Ares, que firma títulos como 'Nadie como tú' y 'Flores negras', seguramente la canción en la que más se luce Roko. Y un tema que remite a la mejor Pasión Vega, otro animal escénico que también interpretó piezas del reclamado escritor gaditano. "Me une una relación de amistad con él a raíz de una imitación que hice. Me envió un tweet privado diciéndome que tenía unos zapatitos que eran de mi horma. Y cuando me presentó estas canciones, me quedé prendada. Son letras tan cinematográficas... Y 'Flores negras' es una historia tan descarnada... Es maravilloso como mezcla la cotidianidad con el realismo mágico".

Por cierto, 'Flores negras' es la canción que cierra el disco y en el tracklist aparece la primera. El orden es a la inversa. El juego de la cuenta atrás llega hasta la carátula. "Cada final es un principio", filosofa. Roko quiere desmarcarse de su "parte más mediática". Y se describe como una "persona bohemia" que sabe que tiene "un don que compartir".