El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, retó al 'president' de la Generalitat cesado, Carles Puigdemont, a "dar la cara ante la justicia" y a verse en las urnas el 21-D, por lo que le emplazó a suspender su "Erasmus" en Bruselas. Irónicamente, le mandó un "mensaje virtual" y le reclamó que "no deje tirados a los suyos" y que pare de "esconderse y excusarse" para evitar los tribunales.

Convencido de la victoria de Ciutadans en los comicios del 21-D, pidió "votar en masa" para "llevar en volandas a Inés [Arrimadas] a la Generalitat" para reconstruir un Govern "autonómico, decente y digno como Catalunya se merece". Llegados a ese momento, según Rivera, "no habrá ni un pueblo donde no haya libertad", en alusión al lugar en el que realizó su mítin, Sant Andreu de Llavaneres (Maresme), consistorio del cual le declaró persona 'non grata' a él y a la líder de la formación en Catalunya, Arrimadas, por su "complicidad" con el 155 y por evitar condenar la violencia policial vivida durante el 1-O.

Objetivo: "coser heridas"

Rivera prometió que la tarea de Arrimadas una vez al mando del Ejecutivo catalán sería "coser heridas, suprimir la línea divisoria que han trazado los independentistas", para que quepan "todas las banderas, lenguas y catalanes" y se aplique "fielmente" el Estatut y la Constitución.

En su discurso, Arrimadas recogió sus palabras y aseguró que trabajará por todos los catalanes, "también por los que les pitan, les insultan y les señalan". "Cuando sea presidenta de la Generalitat voy a tener dos objetivos: volver a unir a los catalanes y recuperar la admiración, respeto y buena imagen de Catalunya", enfatizó.

"Cobardía permanente"

Tampoco el PSOE ahorró en descalificativos hacia Puigdemont y su Ejecutivo cesado. Así, el secretario de organización del partido, José Luis Ábalos, le afeó que "en lugar de quedarse con su pueblo se haya ido a Bruselas sin dar la cara", en la misma línea que utilizó el viceprimer ministro de Bélgica y responsable de Economía, Kris Peeters.

Ábalos, asimismo, acusó al 'president' y a los independentistas de cometer un acto de "cobardía permanente" y de "escudarse en los ciudadanos y en los funcionarios".

Ya en el terreno de la audacia política, Ábalos, aseveró que "estos hijos de la burguesía catalana, acostumbrados a no pagar ningún peaje, se han pensado que esto de la independencia, es decir, conculcar las leyes, es gratis".