Renfe y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) han firmado un acuerdo de financiación por importe de 600 millones de euros que permitirá a la compañía española abordar nuevos proyectos como el plan de estaciones de Cercanías, implantar wifi en trenes y estaciones y la compra de material rodante.

El presupuesto de la compañía para 2016 prevé que las inversiones alcancen 372 millones de euros, de los que 110,8 millones estarán destinados a mejorar andenes, mobiliario y sistemas de información en más de 100 estaciones de Cercanías, en coordinación con el Ministerio de Fomento y Adif, señala el departamento.

El acuerdo, suscrito entre el presidente de Renfe, Pablo Vázquez, y el vicepresidente del BEI, Román Escolano, y con la presencia de la ministra de Fomento, Ana Pastor, tiene una disponibilidad financiera de tres años sin que obligue a Renfe a disponer de todo el importe acordado.

Así, el plan para las estaciones se extenderá a las redes ferroviarias de cercanías de Madrid y Barcelona, así como en las de Asturias, Bilbao, Cádiz, Málaga, Murcia, San Sebastián, Santander, Sevilla, Valencia y Zaragoza.

Las obras incluirán la adaptación de estaciones para mejorar la accesibilidad y garantizar el servicio a personas con movilidad reducida. También comprende la remodelación de plataformas para trenes largos, instalación de ascensores y escaleras mecánicas, pasos superiores e inferiores o rehabilitación de estaciones, entre otras mejoras.

Las inversiones se destinarán también a la compra de material rodante prevista por la compañía.

El BEI es una institución de financiación a largo plazo en la Unión Europea y cuyos accionistas son los estados miembros.