ERC ha anunciado este lunes la decisión de abandonar el gobierno de Barberà del Vallès, donde forma parte del ejecutivo local junto a Junts per Barberà (que cuenta con miembros de la CUP) y Plataforma Ciutadana per Barberà, que ostenta la alcaldía en la persona de Sílvia Fuster. La decisión responde a la negativa de la edil de ceder espacios para celebrar el referéndum del 1-O a la Generalitat y retirar competencias a los concejales de sus socios, según éstos han denunciado. En Mollet, la misma situación ha llevado al PDECat a retirar el apoyo al socialista Josep Monràs.

El acuerdo de gobierno en Barberà del Vallès contemplaba la colaboración para celebrar el referéndum, una circunstancia que se rompió cuando Fuster decidió no dar apoyo a la llamada de la Generalitat. Fue entonces cuando Junts y ERC decidieron tomar las riendas y ofrecerse como miembros del ejecutivo local para colaborar, por lo que Fuster les retiró competencias y atribuciones para que no li hicieran sin su consentimiento, según denunciaron los republicanos.

Ahora, mientras Junts per Barberà ha pospuesto cualquier decisión respecto a su relación con el gobierno local hasta el 2 de octubre, ERC ha optado por romper el acuerdo y renunciar a seguir formando parte del mismo. Aún así, no se ha especificado a partir de cuando tendrá efecto tal decisión.

Por lo que refiere a Mollet del Vallès, el PDECat ha optado por retirar su apoyo de gobernabilidad al PSC, que lidera el alcalde Josep Monràs. La decisión se toma después que el ejecutivo local no haya cedido espacios para la celebración del referéndum.

Esplugues

Por otra parte, la semana pasada se consumó la decisión del PDECat de Esplugues de Llobregat de romper el pacto de gobierno con el PSC tras la decisión de la alcaldesa, Pilar Díaz, de negarse a poner a disposición del Govern puntos de votación en el referéndum del próximo 1 de octubre.

Una reunión de la agrupación local del PDECat decidió romper el pacto tras diversos encontronazos con el gobierno socialista de la localidad. El PSC atribuye la decisión de los posconvergentes a una situación de crisis interna en el seno de la agrupaicón local del PDECat. El responsable local de los soberanistas en cambio ha reafirmado que la ruptura tiene que ver con la posición de Díaz respecto al 1-O.

No responde a una estrategia

Con todo, la dirección del partido soberanista en Barcelona sostiene que no existe una decisión generalizada de romper con el PSC en las alcaldías donde exista un pacto y los socialistas decidan no apoyar el referéndum. Según la coordinadora general del PDECat, Marta Pascal, la linea del partido "no es romper pactos", por lo que "hay que circunscribir el caso de Mollet en un tema muy local y no hacer de ello una causa general ni una estrategia de partido", ha recalcado.

Preguntado al respecto en rueda de prensa en la sede del PSC, el secretario de organización socialista, Salvador Illa, ha asegurado que no tenía noticia de esta cuestión. "En cualquier caso, nos sabe muy mal que se trasladen al ámbito del mundo municipal estas tensiones" por el referéndum unilateral, ha apuntado.