El expresidente Carles Puigdemont ha rectificado, renuncia a la lista del presidente y se aviene ahora a liderar la lista del PDECat bajo las siglas del partido. De esta manera, el partido heredero de Convergència contará con papeleta propia en las elecciones del 21-D, después de que tanto ERC como la CUP hayan decidido concurrir en solitario.

Según han revelado fuentes oficiales del PDECat a este diario, uno de los motivos de la renuncia de Puigdemont a su lista cívica es poder conservar las subvenciones con las que cuenta el partido heredero de Convergència para la campaña, así como los espacios electorales en los medios públicos. En ambos casos, el 58% de los que correspondan a Junts pel Sí, según lo acordado a incribir la marca electoral del 2015.

Según la ley orgánica de régimen electoral general, las agrupaciones de electores, una de las opciones que barajaba Puigdemont para su candidatura «de país», solo cuentan con 10 minutos de emisión frente a los 45 de los que disponen las coaliciones que lograron al menos un 20% de los votos en los anteriores comicios, que sería el caso de Junts pel Sí. Ahora, PDECat y ERC deberán repartirse este tiempo, pero siempre serán más de 10 minutos.

La candidatura del expresident incluirá a los exconsellers del PDECat en prisión preventiva y también a los que están junto a él en Bruselas. Asimismo, integrarían la lista dirigentes de ANC y de Òmnium Cultural. En todo caso, según añaden las citadas fuentes, quienes seguro que no formarán parte de la candidatura son cargos del partido como los coordinadores Marta Pascal y David Bonvehí, que se centrarían en la tarea de consolidar al partido surgido de las cenizas de CDC, fundado en el 2016.