El PSPV ha puesto en marcha una urgente campaña interna para que el PSOE admita que el PSC pueda hacer un voto "singular" en la investidura de Mariano Rajoy el próximo sábado. Eso sí, sería únicamente para ellos. Para nadie más, incluidos los propios diputados de la Comunitat Valenciana que se han mostrado críticos con la decisión de facilitar un nuevo gobierno del PP y, por supuesto, Pedro Sánchez, el dimitido secretario general.

"No pedimos una libertad de voto total para el grupo, sino que se acepte una singularidad de voto para el PSC. Hay muchos argumentos, la propia relación entre el PSOE y el PSC y la situación catalana, por ejemplo", ha explicado José Muñoz, diputado autonómico y representante de los socialistas valencianos en la gestora. Intuyen que la propuesta, que lideran por su cercanía con el PSC, podría tener buena acogida en federaciones como la vasca o la balear y que tendrán que trabajar mucho para convencer a otras como la andaluza, la extremeña o la de Castilla-La Mancha. Y por eso echan mano de argumentos prácticos. "La abstención es una decisión estratégica y lo que trasladamos es que el modelo que pedimos para el PSC también se debería valorar desde un punto de vista estratégico", ha apuntado. Ha afirmado que no comparten la manera de proceder de los socialistas catalanes en este proceso pero que es necesario "evitar una fractura entre ambos partidos que son fundamentales el uno para el otro".

Muñoz ha asegurado que él mismo ha trasladado esta posición a la gestora y que otros representantes de la federación valenciana están llevando a cabo otras gestiones internas en el partido para "persuadir a la gestora y al PSOE de que se estudie esa opción". El tiempo apremia y el diputado valenciano ha explicado que se podría acordar esta 'bula' en una reunión de la comisión gestora que ha admitido "que no está prevista, pero podría convocarse y, si no, podría hacerse en la reunión previa del grupo parlamentario". También habría que definir, y eso sería aún más complicado, cómo se plasmaría esa singularidad que piden para los socialistas catalanes y ha abierto la puerta a que pudieran "votar no o ausentarse, sería algo que habría que definir". Pero el tiempo apremia, ha admitido.

FRACTURA INTERNA EN EL PSPV

El propio PSPV está viviendo en primera persona la fractura interna de la anunciada abstención. El síndic Manolo Mata que mantuvo la apuesta por el 'no' a Rajoy ha admitido este jueves en Les Corts que Ximo Puig, presidente de la Generalitat, tiene desde el pasado 28 de septiembre "un escrito con mi dimisión para utilizar cuando él quiera no sólo como síndico sino como diputado". Mata ha resaltado su absoluta lealtad "a Puig, al PSPV y a l'Acord del Botànic" y que es "inquebrantable" pero ha recalcado que sus posiciones políticas "son mías y lo que está pasando en Madrid creo que nos perjudica".