El PSOE anticipa que el próximo 1 de octubre habrá algún tipo de votación en Cataluña. No será el referéndum vinculante sobre la independencia planteado por el Govern, pero sí habrá papeletas y urnas, asumen los socialistas, que ponen el acento en la ilegalidad y la falta de garantías de esta convocatoria.

“Será un puro y simple recuento sin ningún valor jurídico”, ha dicho este miércoles en la Ser la presidenta del partido, Cristina Narbona, quien ha pedido a los catalanes, y en especial a Podemos y los ‘comuns’, que no legitimen con su participación un “simulacro” que solo generará más “frustración” al carecer de valor jurídico.

Narbona también ha reclamado “proporcionalidad” al Ejecutivo central, cuya tesis es que el 1-0 no se llevará a cabo. “El referéndum no se va a celebrar. [Carles Puigdemont y Oriol Junqueras] Pueden asumir su fracaso ahora o el 1 de octubre”, dijo a mediados de julio la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría.

Los socialistas acompañan al Gobierno en sus medidas para impedir la convocatoria de autodeterminación. Apoyan el recurso ante el Tribunal Constitucional (TC) contra la reforma del reglamento del Parlament que permite tramitar de forma exprés el referéndum. Pero en las últimas semanas han tomado más distancia de Mariano Rajoy, con quien Pedro Sánchez se reunió a principios de julio para abordar la convocatoria independentista.

MOTIVO DE DIMISIÓN

Este lunes, por ejemplo, la vicesecretaria general, Adriana Lastra, incluyó la “incapacidad” del jefe del Ejecutivo para “solucionar la crisis territorial” entre uno de los motivos por los que debería dimitir. Los otros eran la corrupción y la brecha social. “Lleva seis años como presidente del Gobierno y ha sido una máquina de crear independentistas. Él y Artur Mas, primero, y después Carles Puigdemont. No ha movido un dedo para intentar solucionar la crisis territorial. Ahora bien, nosotros, que hacemos una oposición de Estado, siempre vamos a respaldar al Gobierno frente al independentismo”, señaló la número dos del PSOE.

Los socialistas reclaman “soluciones políticas” como las incluidas en su Declaración de Barcelona, aprobada por el PSOE y el PSC a mediados del mes pasado. En septiembre comenzarán a registrar en el Congreso de los Diputados las iniciativas que recoge este documento, que aboga por una reforma de la Constitución de corte federal, mejoras en la financiación y recuperación de las partes del Estatut recortado por el TC en su sentencia del 2010.

Al mismo tiempo, Sánchez multiplicará el próximo mes su presencia en Cataluña. “Es importante que la ciudadanía sepa que el PSOE y el PSC se van a implicar a tope durante el mes de septiembre. Pedro Sánchez va a hacer muchísimas visitas a Cataluña porque el 1 de octubre no es la solución a los problemas de Cataluña”, avanzó el martes a Efe la portavoz parlamentaria de los socialistas, Margarita Robles.