La mayoría del Congreso ha instado hoy al Gobierno a que las nueve autopistas quebradas que serán rescatadas por el Estado no vuelvan a privatizarse y que no se prorrogue la concesión de las vías rápidas que vence entre 2018 y 2021.

A falta de la votación, el PSOE, PNV, ERC, PDeCAT y Compromís han apoyado hoy en el pleno del Congreso la proposición no de Ley de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea, que solicita que las autopistas de peaje sean gestionadas por el Estado, mientras que Ciudadanos se abstendrá.

El grupo parlamentario del PP había presentado una enmienda a esta iniciativa, que ha sido rechazada por Unidos Podemos, ya que, aunque pedía no volver a renovar las concesiones de autopistas que vencen entre 2018 y 2021 -entre ellas la AP-2 Zaragoza-Mediterráneo-, no descartaba que las vías rescatadas pudieran volver a ser licitadas en el futuro.

La diputada de En Marea Yolanda Díaz ha criticado que España sea el país europeo con más kilómetros de autopistas y no haya una gestión única, si no que se atiende a los intereses privados y a los "tentáculos de las constructoras" que han hecho negocio y han "estafado" a los ciudadanos.

El socialista César Ramos dice que apoyan la propuesta porque la "filosofía es la correcta" aunque plantea dudas sobre si los ciudadanos deben pagar por ellas y aclara que su partido pide circular sin peaje por las autopistas cuando se cumpla el plazo de concesión.

Ramos cree que los ciudadanos no deberían pagar en las autopistas en quiebra, una propuesta que ha hecho la diputada de ERC Teresa Jordá quien ha pedido congelar las tarifas de peaje hasta que venza la concesión y avanzar hacia peajes homogéneos, armónicos y sostenibles.

El diputado de Ciudadanos Toni Roldán ha criticado que la pérdidas de las autopistas quebradas sean socializadas y ha pedido que sean las concesionarias las que asuman los riesgos y paguen, ya que "lo que hace falta es más mercado y no menos".

Desde el PNV, Iñigo Barandiarán, ha apoyado la propuesta porque todavía hay "pequeños trozos" de autopistas en el País Vasco que deben volver a las diputaciones forales y ha explicado que otro debate es el de las tarifas, que debería versar sobre: "Quien usa paga y quien contamina paga".

El diputado del PDeCAT Ferrán Bel ha dicho que vota a favor pero aboga porque determinadas vías rápidas no sean gratuitas, mientras que el portavoz de Compromís, Joan Baldoví, ha criticado el "negocio perfecto" de rescatar autopistas quebradas y volverlas a privatizar.

José María Barrios, del PP, ha dicho que "todas las autopistas son públicas" y que el 80 % de las vías son gratuitas, y ha defendido que el Gobierno de Mariano Rajoy vaya a ser el primero que en 40 años ha decidido no prorrogar las concesiones.

El diputado de Foro Asturias Isidro Martínez Oblanca afirma que el modelo concesional garantiza la inversión en infraestructuras y su eliminación supondría una "ruina" para España.