Unos 400 manifestantes de extrema derecha contrarios a la independencia-según la estimación del Ayuntamiento- se concentraron la tarde-noche del viernes en Bareclona, ante la sede de la ANC. Tras la convocatoria, la mayoría de los manifestantes se dirigieron al cuartel de la Guardia Civil de Travessera de Gràcia, y por el camino se produjeron varios incidentes, entre ellos una agresión, según recogieron los testimonios.

Convocados por redes por partidos de extrema derecha y ataviados con banderas españolas y alguna catalana, los manifestantes alabaron frente a la sede de la ANC a la Guardia Civil por las detenciones de cargos de la Generalitat y clamaron contra "los traidores de la patria".

Los manifestantes se encararon a un grupo más pequeño de personas de signo contrario a los que les han llamado terroristas, y estos les han respondido cantando 'Els Segadors' y gritos de 'Español el que no vote'.

Tras unos minutos de tensión, y separados por un cordón de los antidisturbios de los Mossos d'Esquadra --Arro y Brimo--, el grupo de independentistas decidió abandonar el lugar, quedando los otros entonando cánticos como 'Yo soy español', 'España unida jamás será vencida', además de loas a la Virgen del Pilar y la Guardia Civil.

Los manifestantes permanecieron durante aproximadamente una hora ante la sede de la ANC, donde reclamaron prisión para el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, encendieron bengalas y se reivindicaron en un manifiesto como "soldados de la patria".

Insultos y agresiones

Sobre las 20.30 horas los organizadores desconvocaron la marcha, pero el grueso de la misma se dirigió por las calles de Barcelona hasta el cuartel de la Guardia Civil de Travessera de Gràcia, en un recorrido en el que insultaron a varias personas que se encontraron a su paso y que portaban la bandera 'estelada'.

Según recogen varios testimonios en las redes sociales, el grupo insultó y se encaró a varios transeúntes, arrancó carteles favorables a la independencia y se enfrentó a algunos coches que hicieron ver su contrariedad a la marcha. Otros vídeos denuncian, también, una agresión a un joven.

Ante el cuartel de la Guardia Civil --el mismo donde estuvieron detenidos los cargos de la Generalitat arrestados por el referéndum- y con las banderas en alto, los manifestantes dedicaron vítores y aplausos al Instituto Armado clamando: "¡No estáis solos!". Según algunos testimonios, al menos un agente desplegó una bandera española pasa saludar a los manifestantes.

En este escenario, y con la Travessera de Gràcia totalmente cortada al tráfico, los antidisturbios pusieron en marcha un cordón policial para separar a los manifestantes de un grupo de independentistas, registrándose insultos y reproches mutuos.