Francesc Homs ha abierto el turno del Grupo Mixto con una intervención en la que ha afeado al presidente en funciones su nulo diálogo con las instituciones catalanas. Pese a todo, y frente a las reformas que Rajoy ha expresado a lo largo del debate que quiere emprender, el del partido demócrata ha afirmado que su fuerza "no sabe cuánto tiempo estará en Las Cortes, pero mientras esté, saldrá a jugar". Es decir, participará de las respectivas mesas de diálogo.

Eso sí, tras calificar de “provocación” que el miércoles Rajoy afirmara que siempre ha estado abierto al diálogo, Homs ha preguntado que "qué le respondió a Artur Mas cuando le presentó una lista de 23 demandas para Cataluña, todas ellas alejadas del proceso soberanista”, en referencia a una reunión en la Moncloa hace dos años. “Nada”, ha seguido.

Homs ha mantenido un tono duro con Mariano Rajoy al que le ha dicho que “no debería ser presidente” dadas las condiciones, es decir, a la falta de apoyos propios en el Congreso, por los casos de corrupción y por su inacción en el proceso catalán.

Al hilo de este último punto, el neoconvergente le ha espetado: “Son ustedes los que rompen. Con sus mentiras. Mintieron al lendakari Juan José Ibarretxe, con aquello de que “en ausencia de violencia se podía hablar de cualquier asunto. Y engañaron al pueblo catalán, con sus recursos contra el Estatut”.

MEDIDA TOMADA

Imputado por la causa del 9-N, Homs ha abordado también el asunto de las posibles inhabilitaciones. “¿A cuántos sancionarán? ¿A 50?, ¿A todos? Y después, ¿qué?" insinuando la inutilidad de la medida. Y se ha jactado de que el independentismo ha tomado "la medida" al Gobierno del PP.

El neoconvergente también ha tenido un recuerdo para el PSOE y su decisión de apoyar la investidura del presidente en funciones. “No cuelguen el muerto a los demás. Tenían la llave y la han usado para dar la presidencia al PP. Su voto legitima al PP y a sus políticas”.

En su réplica, Rajoy ha aseverado que prefiere llegar a la presidencia del Gobierno de la mano de la abstención del PSOE que “con el apoyo de la CUP”. Es muy difícil llegar a acuerdos con los planteamientos maximalistas que tiene la exConvergència. “Les pido flexibilidad. Porque en ese diálogo, ¿puedo decir algo yo?” se ha preguntado retóricamente Rajoy.