Con Mariano Rajoy de viaje oficial en Brasil y Uruguay y Soraya Sáenz de Santamaría en Tarragona, para los Juegos Mediterráneos del 2018, y en Barcelona, para el tenis, los focos de la actualidad del 'caso Lezo' se posaron en Madrid sobre los ministros de Justicia y de Interior. Motivos de sobra tienen estos días los dos para poder hablar ampliamente del último escándalo que está afectando al PP. Tanto Rafael Catalá como Juan Ignacio Zoidoaunaron esfuerzos en la sesión de control en el Senado para defenderse de la oposición, que les acusa de entorpecer la investigación y reclama dimisiones.

En sus intervenciones en el hemiciclo, los dos ministros coincidieron en cargar contra los políticos del PSOE, Ciudadanos y Podemos por sus críticas por la falta de separación de poderes que ponen de manifiesto los episodios que se van conociendo, como la reunión entre el hermano de Ignacio González con el número 2 de Interior o el aviso de un "secretario de Estado" al expresidente de Madrid para que fuera con "cuidado", revelado por 'Interviú'. Catalá afeó al PSOE que siembre "dudas" y que se alinee "con las tesis más antisistema". "Está haciendo un gravísimo daño a las instituciones", remató. En la misma línea, Zoido consideró que los argumentos de los socialistas, Ciudadanos y Podemos son "populistas" por "poner en duda el funcionamiento de las instituciones".

"¿CREE QUE SOMOS TAN TONTOS"?

Senadores de los tres partidos intentaron aclarar con qué fin el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, recibió en su despacho el 8 de marzo a Pablo González y de qué hablaron. Se ha sabido que a la salida de la cita, el hermano del exlíder del PP madrileño llamó a una persona y le aseguró: "Ha sido muy interesante. Te lo contaré, pero no por teléfono". Zoido insistió en que la reunión fue "meramente protocolaria" y que Nieto no sabía que estaba implicado en ninguna investigación, por lo que rechazó cualquier "injerencia" del Ejecutivo en la causa.

"¿Cree usted que somos tan tontos como para que si queremosdestruir [pruebas] o hacer alguna de las barbaridades que ha dicho usted lo vayamos a hacer a las 9.30, con una reunión en un despacho, o que procuraríamos ocultarlo como lo hacíamos antes [sic]?", soltó al representante de Ciudadanos.

SMS A GONZÁLEZ

La tensión por el 'caso Lezo' continuó fuera del hemiciclo. En los pasillos, Catalá se vio obligado a dar explicaciones por un mensaje que este martes se supo que había enviado a González en noviembre: "Gracias, Nacho. Un fuerte abrazo. Ojalá se cierren pronto los líos". Catalá aseguró que ese SMS era una respuesta de agradecimiento a otro que el expresidente le había mandado el 3 de noviembre, cuando se conoció el nuevo Gobierno de Rajoy y se supo que mantenía la cartera de Justicia. Según el ministro, con la expresión "los líos" se refería a la extraordinaria situación de que España hubiera estado un año sin gobierno y se hubieran celebrado dos elecciones generales. Zoido también ha reconocido que González le llamó para felicitarle por su designación y que quedaron para "tomar un café" que nunca se concretó.

GUARDIAS CIVILES CON GANZÚA

Catalá aprovechó su intervención ante la prensa para defender la independencia de la fiscalía. Precisamente este martes, el fiscal anticorrupción, Manuel Moix, negó que impidiera ningún registro, sino que planteó que "se hiciera en otro momento", y dijo que no ve motivos para dimitir ya que le "acredita" el haber ordenado prisión para el expresidente.

El proceso para desbaratar la trama está ofreciendo episodios de película. Según desveló la Ser, el juez Eloy Velasco autorizó colocar un micrófono en el despacho en el que Ignacio González trabajaba como abogado. Lo hicieron agentes especializados de la Guardia Civil que accedieron a la oficina con una ganzúa.