La Fiscalía de la Audiencia Nacional considera terrorismo la agresión sufrida por dos guardias civiles y sus parejas el pasado día 15 en Alsasua, dos de ellos cordobeses, por lo que ha informado a la juez Carmen Lamela a favor de la admisión a trámite de la denuncia presentada por el Colectivo de Víctimas del Terrorismo del País Vasco (Covite).

El fiscal José Perals considera que el Juzgado Central de Instrucción número 3 debe investigar la agresión sufrida por los agentes, ya que se enmarca "dentro de la campaña de hostigamiento que sufren los agentes en determinadas localidades del País Vasco y Navarra y, concretamente, en la localidad de Alsasua". Para ello considera necesario que el juez de Instrucción de Pamplona que lleva el caso remita testimonio de las actuaciones incoadas tras la paliza y que se ordene a la Guardia Civil la elaboración de un informe sobre la campaña de acoso que sufren sus agentes, y a la Policía Foral de Navarra, las actuaciones practicadas sobre lo ocurrido.

En su informe, el ministerio público sostiene que "se trata de graves hechos delictivos contra la integridad física de miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad realizados con el propósito de atemorizar a colectivos que no comparten sus ideas y generando una grave alteración para la paz pública".

En este sentido, el informe recuerda la Alternativa KAS, en la que se incluían las exigencias de la organización terrorista ETA para abandonar su actividad, entre las que citaba la expulsión de Euskadi de la Guardia Civil. También menciona que fue uno de los ejes de actuación de la izquierda abertzale y fue uno de los motivos por los que se condenó a la Mesa Nacional de Herri Batasuna en 1997.