La exabogada de Manos Limpias y Ausbanc Montserrat Suárez ha cargado este jueves ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz contra la abogada de 'el caso Noos' Virginia López Negrete al afirmar que colaboró con Luis Pineda en la extorsión a los bancos. Por su parte, el presidente de Novacaixagalicia, José María Castellano, ha confirmado que Ausbanc le exigió el pago de 300.000 euros al año y que tuvo que soportar una campaña de desprestigio cuando se negó a pagar.

Suárez se presentó ante el juez como abogada, periodista, escritora y tertuliana de televisión y explicó, en calidad de testigo, que trabajó tanto para Ausbanc como para Manos Limpias hasta el 2005 cuando terminó la relación profesional con Pineda. La letrada fue muy explícita sobre los motivos de esta ruptura. Y es que, según su versión, el presidente de Ausbanc inició contra ella una campaña de desprestigio en twitter. En uno de los tuits publicó: "Eres mejor con la boca que escribiendo". Por ello, avisó de que no iba a consentir que se la relacionara personalmente con Pineda.

También explicó que existía "una retroalimentación" entre Ausbanc y Manos Limpias. Y confirmó que López Negrete participó en juntas de accionistas del BBVA en las que tomaba la palabra, en una actuación concertada con Pineda, para cargar contra el directivo de esta entidadAntonio Ballabriga al que quiso imputar en 'el caso Noos' para presionar a este banco. Esta entidad dejó de pagar los convenios de publicidad a Pineda y soportó una campaña de desprestigio que le ha llevado a personarse en este procedimiento como acusación particular.

La letrada también sostuvo que la abogada de 'el caso Noos' estuvo detrás de la querella presentada por Manos Limpias contra Miguel Blesa, expresidente de Caja Madrid, y que le llevó a la cárcel en dos ocasiones por orden del exjuez Elpidio Silva.

LA DENUNCIA

Por su parte, Castellano explicó al juez que tras negarse a pagar a Ausbanc fue objeto de una campaña de desprestigio en twitter en la que le llamaban "gángster" y le acusaban de haber robado al banco. Y que sufrió dos escraches en su domicilio. El banquero contó al juez que su jefe de comunicación le aconsejó que no se reuniera con Pineda. Y que sabía que otras entidades pagaban a Ausbanc desde "hace 20 años".

Pineda y Miguel Bernard, presidente de Manos Limpias, están en la cárcel acusados de haber montado un entramado para extorsionar a bancos, instituciones y personas a las que presentaban querellas y luego retiraban si abonaban la cantidad que les exigían.