Después de las declaraciones de la alcaldesa de Badalona, Maria Dolors Sabater, anunciando que la ciudad catalana abrirá los colegios y pondrá urnas, los voluntarios, en su mayoría organizados a través de la plataforma 'Escoles obertes', se han plantado en los colegios electorales con el ánimo de no dejarlos hasta el domingo 1 de octubre.

Es el caso de la Escuela Jungfrau, que plantea una iniciativa de "48 h. de convivencia en la escuela" -almuerzo, cine, talleres, sesiones musicales- para procurar que el centro educativo no se cierre y que los cuerpos de seguridad no puedan intervenirlo antes del referéndum.

La estrategia de las actividades lúdicas e infantiles es una constante en las escuelas catalanas, aunque luego la presencia de críos no sea la proyectada, como ocurre en la escuela Planas i Casals, cuyo patio estaba este viernes vacío y uno de los voluntarios, David Guerrero, comentaba por la tarde que todavía no tenían programadas las actividades que harán durante el fin de semana.

"Deberíais anular el baile. Es posible que se vote"

Otro caso de escuela que se ha sumado a abrir hasta el 1-O desde este viernes es el colegio Artur Martorell. En este centro el patio sí estaba el viernes por la tarde repleto de críos, y los voluntarios aseguraban que la intervención del consistorio badalonés ha sido inexistente, que todo se ha gestado "por whatsapp entre familias" y que no tienen plan alguno por si los Mossos se disponen a cerrar la escuela: "Les ofreceremos una cerveza fría", bromean.

En cuanto al Ayuntamiento de Badalona , no todas las opiniones van en el sentido de dejarlo al margen. Maite Vilaró, voluntaria del Casal d'avis Antònia Boada, reconoce que "alguien del Ayuntamiento nos llamó y nos dijo: "El día 1 deberíais anular el baile que está previsto. Posiblemente, el 'casal' será sede para votar".

Por su parte, fuentes del consistorio argumentan "no tener constancia" de dicha llamada para dar instrucciones, si bien admiten que el concejal de Gent Gran, Francesc Ribot, se reunió con los ancianos "para hablar del 1-O dado que ellos habían recibido previamente la visita de los Mossos d'Esquadra" para preguntarles si les había llegado alguna carta.

"No entrarán"

Así como las escuelas tienen previsto pasar las madrugadas de viernes y sábado hasta el 1 de octubre, no es el caso del 'casal' Antònia Boada. El sábado está previsto que cierren a las 12 h. y no vuelvan a abrir hasta el domingo, "pero esto le corresponderá al Ayuntamiento", dice la voluntaria Maite Vilaró.

"Un chico ha venido esta tarde para preguntarnos si había algún voluntario apuntado para quedarse toda la noche, ya que si no hay continuidad hasta el domingo la Policía podría precintar el centro para que no se vote. Le hemos dicho que de momento no", sostienen los ancianos.

Joan, otro voluntario, apunta que ante la posibilidad de que se presenten los Mossos mientras el centro está abierto, "si me tocan las narices, cierro la puerta y me voy. Echo a todo el mundo a la calle. Pero entrar, no entrarán".

En la ciudad vecina, Santa Coloma de Gramenet, la entidad educativa Assemblea Groga explica que no conoce ningún colegio electoral que haya decidido estar abierto hasta el 1-O.