El Gobierno confía en cambiar la ley de estabilidad "en pocos días" para desbloquear los Presupuestos, gracias a la triquiñuela reglamentaria empleada este martes a última hora para conseguir levantar el veto del Senado. La maniobra ha levantado airadas críticas de PP y Ciudadanos, pero la Moncloa recuerda que los conservadores emplearon esta misma fórmula por lo menos en 14 ocasiones. Lo que no dice el Gobierno es que en algunas ocasiones el Tribunal Constitucional tumbó las aspiraciones de los populares. Pablo Casado afirma que intentará detener esta medida "autoritaria" en la mesa de la comisión de Justicia y, sino, en la Mesa del Congreso. Como último recurso, aseguran fuentes populares, acudirá al Constitucional.

El presidente, Pedro Sánchez, ha defendido el mecanismo en la sesión de control, este miércoles, y ha afeado al líder de los populares, Pablo Casado, que se haya visto obligado a emplear este recurso porque los conservadores y el partido de Albert Rivera "bloquean" el cambio en la ley de estabilidad imponiendo su "veto" en la Mesa del Congreso. "Sea usted demócrata y desbloquee el debate. ¿Qué miedo tiene?", ha espetado.

Comparación con Maduro

Casado le acababa de reprochar la triquiñuela, tras acusarle de gobernar "a lomos de mentiras y autoritarismos". El presidente del PP ha anunciado que su grupo pedirá amparo en base al artículo 31 del reglamento del Congreso (que regula las funciones de la Mesa) y a seis sentencias del Tribunal Constitucional. En su acusación, ha llegado a comparar la conducta de Sánchez con el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.

En medio de la polémica, Pablo Iglesias ha salido a defender la actuación del Gobierno. Su lsecretario general, Pablo Iglesias, ha opinado que la maniobra es "completamente reglamentaria".

En el PP admiten que han usado esa argucia en el pasado pero aseguran que era con medidas "mucho menos importantes" que unos Presupuestos Generales del Estado. En el documento adjunto que está en esta misma página, se pueden leer algunos de los temas que intentaron colar en el último momento: firma electrónica, ley del juego y también en varias ocasiones asuntos concretos de las Cuentas (partidas para contratación y subvenciones).

El proceso en las Cámaras

El debate radica en que el Gobierno necesita levantar la potestad otorgada por el PP al Senado en la ley de estabilidad para vetar el trámite de la senda de déficit, que es el primer paso para la presentación de los Presupuestos. Los populares tienen mayoría absoluta en la Cámara Alta y el Ejecutivo sabe que tumbaría su proyecto. Para disipar ese bloqueo es necesario cambiar la ley con urgencia, pero la pinza entre conservadores y liberales en la Mesa del Congreso ha rechazado que este cambio se haga con celeridad.

Ante el vértigo, el Gobierno ha optado por una técnica jurídica, una especie de atajo legal que ha cogido a PP y Ciudadanos a contrapié. A última hora de este martes, justo antes de que se cerrase el plazo, el PSOE registró una enmienda a la ley que regula la formación de los jueces para lograr una mayor especialización en la lucha contra la violencia de género. A través de esa maniobra, puede cambiar la ley de estabilidad desde una comisión cuya presidencia está en manos de los socialistas, lo que les garantiza el manejo de los tiempos.

El PP recurrirá primero ante la presidencia de esa comisión, sino les da la razón, después irán a la Mesa del Congreso y apelarán al artículo 31.4, que señala que ese órgano (que controlan el PP y Ciudadanos) puede "calificar, con arreglo al Reglamento, los escritos y documentos de índole parlamentaria, así como declarar la admisibilidad o inadmisibilidad de los mismos". Si tampoco lo logran, avisan en el partido de Casado, acudirán al Tribunal Constitucional.

La amenaza no parece inquietar lo más mínimo al Ejecutivo, consciente de la lentitud del Tribunal y confiado en que su actuación es conforme a ley. "Habrá presuputestos", ha asegurado la vicepresidenta, Carmen Calvo. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, también ha pronosticado que ahora, "en pocos días", el Gobierno podrá cambiar la ley de estabilidad, puesto que ya ha abierto la pista posible y cuenta con mayoría en el Congreso para hacerlo.

Petición de elecciones a Sánchez

Según Casado, en cambio, esta triquiñuela es el último equemplo de que a Sánchez la Moncloa "le queda grande". "Por mucho que repita que es presidente del Gobierno, el hábito no hace al monje", se ha quejado el líder del PP antes de pedirle que deje de ser "un lastre" para España y convoque elecciones.