La Comisión Europea ha reiterado que una Catalunya independiente quedaría automáticamente fuera de la Unión Europea (UE) y sería considerada como un país extracomunitario que requiere el voto favorable unánime de cada uno de los estados, incluida España, para poder ser admitida de nuevo. El Ejecutivo comunitario ha respondido así al informe del Consell Assessor per a la Transició Nacional (CATN) presentado la víspera, que estimaba que una Catalunya independiente podría seguir formando parte de la UE por una cuestión de "lógica y pragmatismo", ya que en el Tratado de la UE no hay ninguna disposición concreta sobre qué hacer si una región se independiza.

"La posición de la Comisión Europea en este asunto es que si una parte de un estado miembro deja de ser parte de ese territorio porque se convierte en independiente, el tratado de la UE dejar de aplicarse en ese territorio", ha señalado el portavoz comunitario, aunque ha insistido en que "la Comisión Europea no tienen ningún comentario específico sobre el informe" de los asesores de la Generalitat.

Una Catalunya independiente, como "nuevo estado se convertiría, por el hecho mismo de su independencia, en un país tercero respecto a la Unión y el tratado de la UE no se aplicaría desde el mismo día de su independencia", ha añadido el portavoz de la Comisión Europea.