El presidente en funciones de la comunidad de Madrid, Ángel Garrido, cree que su antecesora Cristina Cifuentes "no ha incumplido el código ético" del Partido Popular con los detalles de su conducta (máster y robo) que se llevan conociendo desde el 21 de marzo.

"La decisión sobre si Cristina Cifuentes debe seguir siendo presidenta del PP de Madrid corresponde a dos personas, a ella misma y al presidente nacional", ha afirmado a preguntas de los periodistas este jueves durante su primera comparecencia ante los medios como interino en la presidencia madrileña.

Ha sido una aparición pública que Garrido ha intentado pulir al máximo presentándose como "un disciplinado militante" dispuesto a aceptar lo que Rajoy decida sobre su futuro. "La decisión de quién tiene que ser el candidato a la presidencia de una comunidad autónoma corresponde a la dirección nacional y al presidente nacional. Acataremos su decisión", ha afirmado Garrido.

Leal a Cifuentes

El presidente en funciones no ha que querido entrar a comentar si en su partido se ha desatado una fobia a todo lo que suene a Cifuentes, pero sí ha recalcado en dos ocasiones su lealtad a la expresidenta, de cuyo trabajo "nos sentimos deudores", ha dicho, para añadir, más adelante: "Yo soy leal [a Cristina Cifuentes], y si alguien piensa que la lealtad inhabilita a cualquiera para un proyecto político, yo pienso justo lo contrario".

Garrido ha reconocido que mantuvo ayer varios contactos con el coordinador general del PP, Fernando Martínez-Maíllo: "He estado hablando casi permanentemente con él, pero no de la candidatura", ha contado, para segurar además que, "soy el secretario general de mi partido en Madrid y no pondré ni un pero a la decisión que tome" la cúpula del PP.

"En democracia, las instituciones están por encima de las personas", ha dicho. Pero también ha hecho una observación sobre que "los políticos somos en primer lugar personas", y ha admitido que Cifuentes "lo está pasando mal" tras "un día extraordinariamente duro".

Garrido espera que su partido resuelva la sucesión "lo antes posible". El calendario, con los festivos de mayo, permite alargar la decisión. El 21 de mayo es la fecha límite para que el PP madrileño proponga candidato. La presidenta de la Asamblea de Madrid, Paloma Adrados, tendría después entre tres y siete días para convocar un pleno de debate de investidura. La fecha máxima para que Madrid vuelva a tener un presidente con respaldo parlamentario es el 30 de mayo.

Seguir con el plan

Ángel Garrido ha asegurado que, al menos hasta que haya una decisión de su partido sobre la sucesión, el gobierno madrileño seguirá trabajando en la aplicación del programa electoral "que los madrileños votaron de forma mayoritaria", porque "Madrid es el motor económico de España y no se para, ni se va a parar".

Garrido ha presidido este jueves su primera reunión del Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, cita extraordinaria tras la salida del Ejecutivo regional de Cristina Cifuentes.

El presidente en funciones ya reunió la tarde del miércoles al Gobierno regional para una primera y breve evaluación de la situación tras la dimisión de Cifuentes. Durante la reunión, se les puso en común a a los consejeros los detalles de la decisión de dimisión y se valoró el nuevo escenario.