Solo hay una fecha clara en el futuro más inmediato tras laselecciones generales de este domingo: el 19 de julio. El decreto de convocatoria de los comicios fijó para ese día la constitución de las Cortes Generales. A partir de ese momento, los plazos dependerán del Rey y de Mariano Rajoy. Es de prever que el jefe del Estado abra una ronda de contactos en cuanto el Congreso esté constituido para proponer lo antes posible un candidato a presidente del Gobierno. Y es evidente que quien más papeletas tiene para serlo es el líder del PP.

Rajoy quiere tener encarrilado para entonces un "acuerdo de mínimos" para poder aceptar, esta vez sí, la propuesta de Felipe VI y someterse a la investidura. Una vez sea oficialmente propuesto como candidato, la Mesa del Congreso tendrá que fijar fecha para el pleno de investidura. Como los grupos disponen de cinco días hábiles desde la constitución de la Cámara para formarse, la Junta de Portavoces no estará habilitada para organizar la agenda parlamentaria hasta al menos el 25 de julio.

PLENO EN AGOSTO

Si Rajoy tiene amarrado el pacto, la última semana de julio podría celebrarse ya el debate, aunque lo más probable es que deje pasar alguna semana y la sesión tenga lugar en agosto. El socialistaPedro Sánchez dejó pasar un mes desde la propuesta del Rey hasta el debate parlamentario. Si se repiten estos plazos, la sesión de investidura podría celebrarse la segunda quincena de agosto. El día de la primera votación de investidura empezará a correr de nuevo el plazo de dos meses para investir presidente, un reloj que expiraría a finales de octubre.

Teniendo en cuenta los plazos de negociación y el procedimiento electoral, esas hipotéticasterceras elecciones generales no se celebrarían en ningún caso antes de diciembre. En cualquier caso, ningún partido apuesta por repetir los comicios por tercera vez en un año. Y mientras tanto, el Gobierno de Rajoy seguirá en funciones y sin control parlamentario. En concreto, en julio cumplirá nueve meses en esa situación de interinidad.