Según el sindicato CSIF, el curso ha llegado a su recta final con los achaques que ha venido arrastrando desde el inicio. "Ha sido un curso que se ha definido por la penalización al profesorado por enfermar, aumentar la carga docente del profesorado de Secundaria, la no cobertura en los centros de las bajas por enfermedad durante los 15 días iniciales de la misma --en el mejor de los casos--, en definitiva recortes y más recortes que han supuesto la reducción drástica del número de docentes interinos contratados", señala Elena García, responsable del área de enseñanza de CSIF en Córdoba. Además, un nuevo recorte salarial se sufrirá en las pagas extras de junio y de diciembre, convirtiéndose los docentes andaluces en los peor pagados del territorio nacional. Por otra parte, el rechazo que genera la Lomce completa el panorama de malestar docente. "Ninguna ley educativa podrá prosperar sin el apoyo del profesorado y la Lomce no será una excepción. Es necesario que se demuestre el respeto a nuestra profesión y un mayor reconocimiento social que no se alcanza con palabras grandilocuentes, sino con acciones", concluye.
Por su parte, ANPE-Córdoba señala que este curso ha seguido las directrices iniciadas en el anterior, "con aumento de recortes y pérdidas de derechos laborales, sociales y económicos del profesorado". "El sentir general del colectivo docente es que está harto de ser cabeza de turco de la crisis", afirman. Pero no solo el profesorado padece, "sino que el propio sistema educativo se va deteriorando y sufriendo en sus carnes la burla de la clase política. Se van desmantelando planes y programas, se reducen los presupuestos en todos los ámbitos: formación, construcciones y mejoras, dotaciones, etc", aseguran desde ANPE. El sindicato también quiere denunciar la discriminación que los funcionarios andaluces van a sufrir respecto a las demás comunidades autónomas en relación al cobro de la paga extra de junio y diciembre del año 2013. "No podemos consentir que con una justificación sibilina del Gobierno andaluz, para mantener a su administración paralela de dudosa incorporación, y lo que es más sin acordarse de aquellos que sí mandaron al paro, veamos aminorado de nuevo nuestro poder adquisitivo, ya de por sí maltratado".
