Juan Mayer fue profesor de Geografía e Historia en el IES Trassierra desde el año 2005 hasta 2015. Prácticamente toda su vida profesional formó parte de distintos equipos directivos, tanto en el IES Aljanadic, donde trabajó con anterioridad al IES Trassierrra, como en éste. Fue profesor de Historia, pero podría haberlo sido de lo que hubiera sido necesario, pues se trataba de una mente lúcida, hasta sus últimos días, que siempre quiso aprender.

Inmaculada Troncoso, directora del IES Trassierra recuerda que «fueron muchas las conversaciones que mantuvimos porque me acompañó como amigo y como profesional en el equipo directivo y no había tema sobre el que Juan no tuviera una opinión formada, documentada y digna siempre de ser tenida en cuenta».

Juan Mayer se caracterizaba por su espíritu inquieto, ávido de conocimiento, que no le permitía no estar al día. «No he conocido a una persona que leyera más y con tanto afán», afirma Troncoso. Fue un profesor con letras mayúsculas, un profesor de sus alumnos y alumnas, pero también un profesor de la vida, con matrícula de honor en entrega y fidelidad a sus principios, sus amigos y su centro.

Entre sus compañeros y amigos se encuentra José Rafael Dueñas. Conoció a Juan Mayer en 1996, cuando se incorporó con destino definitivo al que por aquel entonces se llamaba Instituto de Bachillerato de Posadas. Ese mismo curso escolar empezó a impartirse la Logse en el centro y todos los profesores se vieron obligados a realizar un curso de formación para empezar a asimilar los cambios normativos y filosóficos que promulgaba la nueva ley. Dueñas admite que, a pesar de conocerse la teoría, ver la aplicación práctica de la nueva ley en el aula, le resultaba complicado. Fue Juan Mayer quién le abrió los ojos. En sus clases de Geografía e Historia los alumnos no usaban libros de texto, apenas hacían exámenes y sus trabajos consistían en investigar sobre los temas que proponía. En las sesiones de evaluación, Juan construía gráficos y analizaba la evolución de los alumnos con herramientas informáticas. «Recuerdo que, por aquel entonces, no había nadie más ducho en cuestiones informáticas, su gran pasión. Siempre dispuesto a enseñar a todo el mundo y a solucionar los problemas que, por aquel entonces, no eran pocos», afirma Dueñas, quien define a Mayer como una persona inquieta, con gran afición a las leches manchadas y manioso en temas de carretera, no soportando subirse a un coche que no condujera él mismo y disfrutando en soledad de su Ford Orion. «No dormía más de cinco horas, se pasaba las noches leyendo, aprendiendo programación, preparando archivos de fotos para las asignaturas de arte, ordenando sus archivos de música...».

En el IES Trassierra Dueñas y Mayer volvieron a coincidir y a compartir experiencias hasta que Juan Mayer se jubiló en 2015 por incapacidad laboral.

«En el IES Trassierra será recordado por sus virtudes y por su dedicación al cien por cien al centro. Demasiada dedicación, a mi parecer y al de todo el mundo». La pasión por la docencia le llevaba por consecuencia a escuchar en repetidas ocasiones las frases de sus compañeros: «Juan, descansa», «no tienes que llegar el primero e irte el último»...pero para Juan, su vida era el instituto, su familia y sus compañeros.

En una sociedad tan elejada de la comunicación interpersonal, tan distante, tan centrada en el conocimiento, se hace necesario transmitir los verdaderos valores que nacen de dentro, tan como hacía Juan Mayer, simplemente con su profesionalidad y con su bondad. Sus alumnos y alumnas pudieron aprender de esos valores, sin duda.