Con enorme expectación hemos recibido la aprobación del anteproyecto de Ley para la Promoción de una Visa Saludable y una Alimentación Equilibrada por parte del Gobierno de Andalucía. Esta iniciativa viene siguiendo las recomendaciones de la OMS y nace para paliar el alarmante crecimiento que, sobre la población en general y sobre la infantil en particular, ha experimentado en poco más de diez años la obesidad. La obesidad es un problema de salud pública, acarrea el desarrollo de numerosas patologías; según datos de la Consejería de Salud un 40% de los cordobeses padece sobrepeso. Corresponde analizar las causas y aportar soluciones. Entre las causas, el sedentarismo por parte de los niños. El anteproyecto regula la obligación de realizar cinco horas semanales de educación física, disponer de menús saludables y prohibir la venta de productos que contengan más de 200 kilocalorías. Otra solución ante esta epidemia y que el anteproyecto no contempla sería la figura de un profesional sanitario que verificara, siguiera y rigurosamente ejecutara las nociones técnicas del legislativo y que en concomitancia a él se alcanzaría, con total seguridad, el resultado que esta iniciativa busca. El profesional en cuestión no es otra que la enfermera escolar. Finalizo reivindicando la inclusión de esta profesional sanitaria, la enfermera escolar, en el anteproyecto de Ley que la Junta de Andalucía acaba de aprobar. (*) Enfermero