Un total de 99 centros educativos cordobeses participan este curso en actividades del renovado programa educativo Educación Ambiental para la Comunidad Educativa (Aldea), que tiene como objetivo promover en las aulas iniciativas para la conservación de los recursos naturales y el desarrollo sostenible desde una perspectiva integral y con enfoques didácticos innovadores.

De los 99 centros educativos cordobeses, 37 han seleccionado la modalidad de participación A, que corresponde a aquellos centros cuya finalidad es realizar un proyecto integral de educación ambiental desarrollando un proceso de mejora ambiental, mediante una investigación participativa de profesorado y alumnado. Estos centros corresponden a la línea de Educación Ambiental e investigación participativa, en la que se encuentra la Red Andaluza de Ecoescuelas, que forma parte de una red internacional que se extiende por 59 países y en la que están implicados más de 46.000 centros de todo el mundo. En España hay 541 ecoescuelas, de las que el 63% están en Andalucía. Una ecoescuela es un centro educativo que desarrolla un proceso de mejora ambiental, mediante la investigación a través de una audiotoría y posterior corrección de las deficiencias detectadas, que supone asimismo un progreso en la práctica educativa. De las 341 ecoescuelas andaluzas, 61 están además galardonadas con la Bandera Verde que las reconoce como modelo de buenas prácticas ambientales.

Por otro lado, 69 centros participan en la modalidad B, que está dirigida a aquellos centros que quieran desarrollar un proyecto de educación ambiental con temáticas concretas, mientras que siete centros participan en ambas modalidades.

Dentro de la modalidad B existen tres líneas de trabajo con temáticas concretas. La primera de ellas está dedicada a la sostenibilidad y el cambio global, y tiene como objetivo implicar a la ciudadanía en la defensa del entorno desde la educación. Dentro de este apartado se desarrollan los proyectos Terral, de educación ambiental frente al cambio climático; Recapacicla, de residuos y reciclaje, y el proyecto de Huertos Escolares Ecológicos: Ecohuerto, sobre la utilización de huertos escolares ecológicos como recurso educativo.

En la línea de la Educación Ambiental para la conservación de la biodiversidad, que busca promover actitudes como la curiosidad, el respeto y la valoración del patrimonio natural, se llevan a cabo los proyectos Semilla, sobre los ecosistemas forestales y la flora silvestre; Pleamar, sobre el medio litoral, y Educaves, dedicado a la conservación de las aves y sus hábitats.

En la tercera y última línea de tabajo se aborda el conocimiento y búsqueda de soluciones a los problemas socio-ambientales de los espacios naturales a través de los proyectos Doñana, Sierra Nevada, La Naturaleza y tú y actuaciones de educación ambiental en la Red de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía.