La incertidumbre desagrada a los inversores. Y eso se ha dejado notar en la prima de riesgo de la deuda española que se encamina hacia la cota de los 460 puntos básicos, al llegar hasta 459. El rendimiento del bono español a 10 años se ha situado por encima del 6%, hasta el 6,08%. Por su parte, la rentabilidad de los títulos alemanes al mismo plazo, que son la referencia para los inversores, se han desplomado hasta el nivel históricamente bajo del 1,50%, al beneficiarse de una fuerte corriente compradora que empuja al alza los precios y, por tanto, rebaja sutancialmente la rentabilidad.

Subasta del Tesoro

Esta evolución complica las cosas de cara las subastas de deuda que prevé el Tesoro español a partir de la semana que viene, a pesar de que en lo que va de año ya ha cubierto en torno a la mitad de sus necesidades de financiación. En las últimas pujas, aunque ha colocado más cantidad de la prevista, lo ha tenido que hacer a un coste mayor, ya que los inversores exigen un mayor interés para adquirirla.

En la subida del riesgo país tienen mucho que ver las recientes dudas sobre el sistema financiero español y, en concreto, sobre Bankia, que mantiene su desplome en la bolsa que ha contagiado al resto de valores del sector, así como los problemas en Grecia para formar Gobierno y los nuevos rumores sobre una posible salida de este país del euro.

La prima de riesgo se sitúa en su nivel más elevado desde finales de noviembre del 2011. La cota récord fue también ese mes con un máximo de 469 puntos básicos. Además de las dudas sobre la banca, en la evolución del mercado influyen los diferentes informes que apuntan a una posible salida de euro por parte de Grecia.

Según Sergi Hernández, gestor de renta fija de Fiatc, "el problema no sería solo Grecia, sino el temor de que detrás de ese país vinieran Portugal y España". Es por todo ello que España e Italia se mostraban más vulnerables que otros países de la zona euro ante la situación de Grecia.