El Gobierno va a proponer en la Comisión del Pacto de Toledo un nuevo impuesto sobre las grandes multinacionales tecnológicas con el que ayudar a financiar en el futuro el pago de los pensiones. Así lo anunció ayer el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros donde se aprobó remitir a Bruselas el preceptivo Programa de Estabilidad para el periodo del 2018 al 2021.

Según Montoro, la nueva tasa digital se adoptará de forma coordinada con otros países de la Unión Europea. La Comisión Europea (CE) plantea un impuesto del 3% sobre los ingresos brutos de empresas como Google, Apple, Facebook, Twitter, Instagram y de plataformas como Uber, Airbnb o Booking que, según los datos de la CE soportan una tributación de apenas el 9%. «Habrá que ir actualizando los impuestos, no sobre el consumo, sino sobre actividades económicas que hoy no están pagando suficientes impuestos» avanzó Montoro ayer, tras anunciar un nuevo impuesto sobre «determinadas transacciones digitales y la economía digital».

El Programa de Estabilidad aprobado por el Gobierno prevé una ligera desaceleración de la economía española, desde un crecimiento del 2,7% en el 2018 al 2,3% en el 2020 y el 2021 (en el 2019, el 2,4%). Ayer, precisamente, se conoció que el PIB creció el 0,7% en el primer trimestre del año, una tasa que de forma anualizada proyectaría un crecimiento del 2,8% para el conjunto del año.

Entre el 2017 y el 2021, se prevé la creación de casi 1,7 millones de nuevos empleos (hasta un total de casi 20,7 millones en el 2021), de modo que la tasa de paro bajará desde el 17,2% de la población activa del 2017 al 11% en el 2021. De ser así , 14 años después del estallido de la crisis la tasa de paro aún seguirá por encima del 8% del 2007.

Las cuentas públicas llegarán al 2021 con un superávit del 0,1% del PIB y equilibrio en las cuentas de la Seguridad Social, según las proyecciones. La deuda pública bajará al 89,1% del PIB al final del periodo.

Mientras no se logra el equilibrio de la Seguridad Social, el Estado se hará cargo de cualquier desfase del sistema de pensiones, anunció Montoro. Es fundamental «que el modelo quede asegurado y fijado y que se salga del dramatismo de si es el sistema no es sostenible. Es todo lo contrario», remachó ayer el ministro Montoro.

De momento, la actualización de todas las pensiones de acuerdo en el IPC pactada por el Gobierno con el PNV tendrá un sobrecoste de 1.500 millones de euros en los Presupuestos del Estado del 2018 que, según el ministro, se compensará con ahorros en el pago de intereses de la deuda pública y con una menor dotación en este ejercicio para atender la responsabilidad patrimonial derivada del rescate de las autopistas. Para el 2019, el sobrecoste de volver a subir otro 1,6% las pensiones públicas se cifra en 1.800 millones.

En las enmiendas al proyecto de Presupuestos presentadas por PP y PNV la subida de las pensiones con el IPC en el 2018 y el 2019 se trata como «un régimen transitorio» en tanto se alcancen acuerdos en el Pacto de Toledo «que garanticen la eliminación del déficit del sistema de la Seguridad Social».