Lidl seguirá apostando por España en los próximos años tras invertir 110 millones de euros y crear 400 empleos para abrir una treintena de tiendas en el 2017, según ha informado este miércoles la compañía.

Las nuevas tiendas de Lidl disponen de salas de venta más grandes, en torno a los 1.400 metros cuadrados de media, que permiten incrementar la oferta comercial y, en especial, potenciar la presencia del producto fresco, por el cual la compañía está apostando "fuertemente" y que ya representa más de un tercio de su surtido total.

En concreto, las nuevas aperturas de 2017 se realizaron por todo el país, siendo Andalucía (con seis), la Comunidad Valenciana (cinco) y Catalunya (cinco) las regiones donde Lidl inauguró más puntos de venta. Asimismo, la compañía ha destacado el crecimiento registrado en Canarias y Baleares, donde ha abierto en total seis centros, así como el nuevo Lidl de Islazul (Madrid), en lo que supone su primera tienda en un centro comercial.

"Buscamos constantemente las mejores ubicaciones para llegar allí donde está el cliente. Queremos crecer en las grandes capitales, pero también mejorar y ampliar nuestra presencia en los grandes municipios del país", ha subrayado el director general de Expansión e Inmuebles en Lidl en España, David Carim.

La estrategia de la compañía se centra en la búsqueda de parcelas y locales situados en polos comerciales de alta actividad y que gocen de una buena comunicación, con el fin de lograr la mayor proximidad con el cliente y facilitarle la accesibilidad.