El secretario general de la UGT, Josep Maria Álvarez, ha considerado innecesaria la propuesta realizada por el Ministerio de Fomento para resolver la huelga de trabajadores de seguridad de la empresa Eulen en el Aeropuerto de Barcelona-El Prat mediante un laudo, una resolución arbitral por parte de un juez: "No tendría que estar sobre la mesa la posibilidad de un laudo de obligado cumplimiento". Preguntado por el despliegue de la para contrarrestar el efecto de la huelga en el aeropuerto barcelonés, ha criticado el aumento del número de efectivos para "sustituir a unos trabajadores del sector privado por militares".
"Se está conculcando el derecho de huelga y se están poniendo más efectivos de la Guardia Civil para sustituir a trabajadores", ha asegurado, y lo ha cuestionado al contar con unos servicios mínimos del personal de seguridad previstos por ley que, en su opinión, son desmesurados.
"Da la sensación de que el Gobierno ha cogido un atajo e intenta matar moscas con cañones", ha criticado en declaraciones a los medios desde Barcelona, donde ha asistido a la conmemoración del 129 aniversario de la fundación del sindicato en la capital catalana.
Álvarez ha recordado que los trabajadores celebran este domingo una votación en El Prat de Llobregat sobre la propuesta surgida de la mediación liderada por la Generalitat, por lo que "quizás los propios trabajadores mañana con la asamblea tomen una decisión que impida" el laudo.
El líder sindical ha criticado la actitud del Gobierno central en la gestión del conflicto laboral porque "es una situación que se veía venir" dada la precariedad con la que trabajan los empleados de seguridad, ha dicho, y los recortes presupuestarios que recoge las subcontrataciones.
"Tanto es así que algunas veces se han presentado algunas contratas que sólo al sumar el coste de los salarios de los trabajadores ya es más que la subcontrata", ha argumentado, y ha advertido de que la situación en El Prat es la punta de un iceberg que abarca también a personal seguridad de estaciones de ferrocarril y centrales nucleares, entre otros.
OTOÑO CALIENTE "YA EN VERANO"
La UGT planteó que este otoño podía ser conflictivo a nivel laboral por las diversas reivindicaciones de los trabajadores, una situación que Álvarez ha dado por comenzada tras estallar la huelga en El Prat: "El otoño caliente comienza ya en verano". "Necesitamos ir a una política salarial diferente de la que hemos tenido hasta ahora" que incluya un salario mínimo de 1.000 euros, ha reivindicado.
