El ministro de economía, Luis de Guindos, descarta que la última sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea contra la legislación hipotecaria española publicada este jueves vaya a desencadenar una avalancha de reclamaciones, tal y como augura la Plataforma de Afectados por las Hipotecas, pero avanza que la nueva reforma de la ley que prepara el gobierno incluirá medidas para garantizar una mayor información para el consumidor y terminar con los problemas generados por las cláusulas opacas. “No temo una avalancha de reclamaciones pero es muy importante que actuemos rápido con la nueva ley hipotecaria”, ha indicado.

Guindos admite que la sentencia de esta semana es relevante en tres aspectos aunque no traerá las consecuencias de la sentencia sobre las cláusulas suelo. Dos ya habían sido modificados a raíz de varapalos judiciales anteriores -tras cuántos impagos iniciar el proceso de desahucio y los intereses de demora- y la intención ahora es incluir nuevas garantías en la ley para dar más claridad y transparencia a los consumidores. “Lo que vamos a hacer es que en el caso de que existan esas cláusulas, el consumidor tendrá toda la información con la suficiente antelación antes de ir al notario a firmar. Que quede clarísimo y que el notario chequee que entiende formalmente y de fondo el contenido de esas cláusulas en el supuesto de que existan”, ha explicado el ministro.

Según fuentes del gobierno, la idea es que los consumidores dispongan antes de la firma de dos fichas, una con los datos de la hipoteca y otra con las cláusulas problemáticas, como las cláusulas suelo, las de amortización anticipada o gastos. El Ejecutivo utilizará la transposición de la directiva comunitaria sobre hipotecas para incluir estas nuevas garantías. La normativa tenía que haber sido adoptado a más tardar el 21 de marzo de 2016 pero el hecho de que el gobierno estuviera en funciones durante todo el año pasado impidió hacerlo.

PROCEDIMIENTO DE INFRACCIÓN CONTRA ESPAÑA

Es más, España se enfrenta junto a otros ocho países de la UE a un procedimiento de infracción por no cumplir con la normativa, aprobada en 2014, y que obliga a los gobiernos a dar información más clara y comprensible por medio de una ficha europea de información normalizada para que los consumidores comprendan mejor los riesgos de los contratos hipotecarios. Bruselas dio a mediados de noviembre dos meses al gobierno para responder. Guindos ha insistido este viernes en que su intención es acelerar la transposición y aprobar la ley lo antes posible.

“Vamos a intentar acelerarla lo máximo posible. Ya he empezado a hablar con los grupos de la oposición porque el gobierno tiene 137 diputados y va a necesitar apoyos como ya ocurrió con el decreto ley”, ha explicado desde Bruselas avanzando que la próxima semana presentará ante la comisión de economía del Congreso las legislaciones que el gobierno considera vitales como la hipotecaria. “Estoy convencido de que llegaremos a un acuerdo sobre la ley lo antes posible. Las cláusulas abusivas son las que son opacas. Para que no haya abuso tenemos que terminar con la opacidad”, ha insistido.

El ministro también ha anunciado que el martes presentará en el Congreso la reforma de los organismos reguladores que negocian con Ciudadanos, incluida la división de la CNMC en dos organismos y la creación de una agencia de defensa del ahorrador e inversor financiero, una agencia que aglutinaría todas las reclamaciones que se realizan en el ámbito de la banca, seguros o valores.