La compañía de Manresa, Industrias Ponsa, especializada en la fabricación de cintas textiles, ha confirmado el traslado de su sede social a Madrid. Según ha explicado a la agencia ACN la representante del consejo de administración Laura Ponsa el motivo del traslado es la inestabilidad política, y las diversas preguntas que han dirigido a la compañía los clientes ante la posibilidad de una declaración unilateral de independencia por parte de Cataluña. "Tenemos que dar garantías de que continuaremos trabajando con el euro, y tenemos que dar estabilidad a nuestros trabajadores".

Ponsa ha asegurado que, de momento, la planta de producción continuará en Manresa y, por tanto, se garantiza la continuidad de todos sus trabajadores. Hace tiempo que la empresa pasa por un momento complicado, este mismo verano los trabajadores han hecho varias movilizaciones en protesta contra los "incumplimientos" del convenio por parte de la compañía. Esta es la primera empresa de Asturias que traslada su sede social por culpa de la situación política del país.

Con una facturación de 16 millones de euros en el último ejercicio, Industrias Ponsa vende el 30% de su producción en el conjunto del Estado (solo el 5% en Catalunya y el resto a otros países de Europa).