Amazon tendrá que pagar lo que debe en impuestos en Europa. La Comisión Europea mantiene abierta su guerra contra la multinacionales que eluden el pago de impuestos en los estados miembros. Hace algo más de un año reclamó a Apple la devolución de 13.000 millones de euros en concepto de impuestos no pagados en Irlanda y este miércoles ha dado un paso más en esta ofensiva al exigir al gigante del comercio electrónico Amazon que devuelva 250 millones a Luxemburgo por rebajas fiscales ilegales.

Bruselas empezó a pisar el acelerador cuando la danesa Margrethe Vestager asumió las riendas de la poderosa cartera de competencia de la Comisión Europea, a finales del 2014, y desde entonces no ha parado. Los servicios de la competencia comenzaron a investigar a Amazon en octubre del 2014. Casi tres años después concluyen que los pactos fiscales acordados entre la compañía y la hacienda luxemburguesa, en el año 2003 y prolongado posteriormente en el 2011, permitieron a la multinacional rebajar sus impuestos "sin una justificación válida".

Concretamente, los llamados "tax rulings" permitieron al grupo con sede en Luxemburgo (Amazon EU) desviar la vasta mayoría de sus beneficios a Amazon Europe Holding Technologies, una compañía que no está sujeta a impuestos, según denuncia la Comisión Europea. Concretamemte, el pacto avalaba el pago de un royalty de Amazon EU a Amazon Europe Holding Technologies lo que reducía significativamente los beneficios que se podían gravar reduciendo así la factura fiscal del gigante.

Cuatro veces menos

"Gracias a las ventajas fiscales ilegales concedidas por Luxemburgo a Amazon, cerca de tres cuartas partes de los beneficios de Amazon no tributaron. En otras palabras, Amazon pagó cuatro veces menos de impuestos que otras sociedades locales sometidas a las mismas reglas nacionales", ha denunciado este mediodía la comisaria de la Competencia sobre una práctica ilegal. "Los estados miembros no pueden conceder a los grupos multinacionales ventajas fiscales selectivas a las que otras sociedades no tienen acceso", ha recordado.

Y por ese motivo, la Comisión ha decidido también dar un paso más en su caso contra Apple. Bruselas le reclamó el año pasado que devolviera a Irlanda 13.000 millones de euros en impuestos no pagados. Más de un año después de aquella decisión -fue adoptada el 30 de agosto del 2016- Irlanda no ha tomado medidas para recuperar el montante y los servicios de la competencia han decidido recurrir ante el Tribunal de Justicia de la UE. "Entendemos que en determinados casos la recuperación pueda ser más compleja que en otros y estamos dispuestos a ayudar pero los estados miembros deben hacer progresos suficientes para restablecer la competencia", ha esgrimido Vestager. Y por eso, "hemos decidido denunciar a Irlanda ante el Tribunal de Justicia de la UE por no ejecutar nuestra decisión".