Los bancos llevan meses quejándose de que el dinero barato con que el Banco Central Europeo (BCE) trata de activar la economía está hundiendo sus cuentas de resultados. Un lamento que este martes ha querido atajar Danièle Nouy, responsable del Mecanismo Único de Supervisión (MUS) del BCE. "Los tipos bajos también ayudan a los bancos", ha defendido en el mismo escenario donde horas antes el presidente del BBVA, Francisco González, había clamado que esta política monetaría "está matando" al sector.

La alta funcionaria europea ha argumentado en unas jornadas de lobi financiero global Instituto Internacional de Finanzas que los tipos bajos generan crecimiento económico y ayudan a las empresas y los particulares a pagar sus deudas bancarias, al tiempo que facilitan que las entidades logren financiación más barata. Ha admitido, eso sí, que provocan que la rentabilidad del sector financiero esté "bajo presión", ya que los bancos obtienen "básicamente" sus ingresos de la diferencia entre la rentabilidad que cobran por los créditos y la que pagan por los depósitos. Pero les ha advertido que tienen "herramientas" para mejorar su situación que deben poner en práctica.

Nouy les ha instado, así, a mejorar la relación entre sus costes e ingresos, ya que este ratio de eficiencia es "bastante alto y hay margen" para mejorarlo. En este punto, solo ha citado la digitalización como una vía para lograrlo. Pero, aunque no ha hablado de ello, en el sector financiero las mejoras de eficiencia se suelen asociar también a recortes de plantilla y oficinas. Asimismo, ha asegurado que es "evidente que hay lugar para más concentración en algunos países". No ha citado casos, pero el Banco de España lleva desde el verano pasado empujando a las entidades españolas a plantearse nuevas fusiones.

OTROS MERCADOS

La directora de supervisión, que este lunes tuvo una reunión con los mayores banqueros españoles, ha instado también a las entidades europeas a "diversificar" sus actividades. No necesariamente entrando en nuevos segmentos de negocio, ha explicado, sino aprovechando que ahora existe un supervisor único en la zona euro para entrar en algunos nuevos mercados del continente donde hay "oportunidades". Ha recordado, además, que las entidades están intentando "depender menos de los tipos" mediante distintas medidas (por ejemplo, cobrar más comisiones). "Pero es difícil cuando todo el mundo intenta hacerlo a la vez", les ha advertido.

Nouy ha defendido que los bancos deben tener modelos de negocio que les permitan ser rentables porque ello les facilitará estar bien capitalizados y obtener fondos a buen precio con los que financiar la actividad económica. "No es preferir uno sobre otro, pero si el modelo no es rentable habrá que preguntar al consejo(de administración de la entidad) para que cambie de estrategia", ha afirmado antes de sostener que la obligación de los supervisores es ser "duros pero justos" ya que la crisis ha sido muy dura y "muchos ciudadanos" han perdido su trabajo.

MÁS CLARIDAD

En el mismo foro, Ana Botín, presidenta del Santander, ha reclamado "claridad" en la regulación y que el marco normativo se complete e implemente cuanto antes. También ha asegurado que su banco seguirá en el Reino Unido (donde tiene un tercio de sus activos) aunque el país se fuera de la Unión Europea, si bien ha defendido que es mejor que se quede. González (BBVA), por su parte, ha criticado la "especie de trampa" en que se encuentra Europa por la dificultad para tomar decisiones y la falta de integración política.

El ejecutivo del segundo banco español también ha acosejado a los grandes banqueros mundiales presentes en la sala tener "cuidado con los tipos grandes", en referencia a gigantes tecnológicos como Facebook, Google o Amazon, que manejan "uno montón de información". En la misma línea se mostrado Josep Oliu, presidente del Sabadell. "Son la mayor amenaza, están jugando a nuestro juego", ha afirmado después de explicar que su entidad ha repartido 3.000 iPads a sus gestores para que atiendan a sus clientes.