Costó más de la cuenta que viniese, pero Víctor Pérez ya se pasea con la camiseta del Córdoba, aún sin dorsal, por El Arcángel. Llega cedido por una temporada y no hay opción a compra por parte de la entidad blanquiverde. Además, en su cesión se incluye la cláusula del miedo, es decir, no podrá jugar ante el Valladolid en el estreno liguero de los de Oltra, el próximo 22 de agosto (22.30 h.), en el coliseo ribereño.

Pero el caso es que este año estará en el Córdoba y "pensar más allá de este año no sirve para nada. Ya se verá. Tengo que ponerme al servicio del equipo los 42 partidos o más", aunque más bien sean 40 partidos. Al manchego le sedujo de la propuesta del Córdoba el entrenador, José Luis Oltra. "Es una idea que nos gusta (a los jugadores), porque el míster nos quiere protagonistas. Tener el balón siempre gusta. Estamos intentando adaptarnos. Tenemos mucho que mejorar. Estamos en ello. El míster quiere una idea de buen fútbol y ser además sólidos para que cueste ganarnos". Y todo ello iría en contraposición a lo vivido, según Víctor, en el Levante de Lucas Alcaraz, "una experiencia diferente y aquí puedo volver a tener sensaciones positivas de competición y buen trato de la pelota".

El organizador llega al Córdoba "para ayudar al objetivo", que no es otro que el ascenso. Por lo pronto, se juega el puesto con Caballero. "La pelea por el puesto es buena para el equipo. El que esté mejor, a jugar. Hay que apretar todos los días".