"Ufff.. Ahora me tengo que parar.Si empezamos con las preguntas, mejor. Así superamos este bache". Ernesto Valverde no podía seguir hablando. Estaba tan emocionado que tuvo que detener hasta en dos ocasiones su discurso. "Es un día duro para mí", había empezado diciendo el ya exentrenador del Athletic Club de Bilbao. Acompañado por Josu Urrutia, el presidente del club vasco, el técnico extremeño no quiso hablar del Barcelona. "Cuando haya proposición de algún club, conocerás mi respuesta", ha dicho Valverde. "Tengo que decir para dejarlo bien claro que no tengo ningún compromiso con ningún equipo. Yo no he hablado con nadie, no voy a negar que tengo un agente y hay equipos que se han interesado por mí", ha reconocido el gran candidato para suceder a Luis Enrique en el Camp Nou.

"Si me embargo en alguna aventura tiene que ser un poco difícil, las que han parecido más fáciles no me han ido bien", ha explicado Valverde. "¿El Barcelona? Lo siento, pero no puedo confirmarlo aquí y ahora. Lo siento", ha revelado indicando que "cuando salga por esa puerta" en referencia a la salida de San Mamés, empezará a valorar su nuevo destino. "Llevar mi decisión al límite ha provocado especulaciones. Pero mejor no me pregunten por colegios o si alguien me está buscando casa en Barcelona, Roma o Segovia", ha indicado el técnico.

EL FUTURO

"Yo soy responsable de mi honestidad. Por lo que yo hago y por lo que yo digo", ha añadido para desvincularse de todos esos comentarios sobre su futuro. "Claro que cabe la posibilidad de un año sabático. Claro, ¿por qué no? Sí, puedo hacer lo que quiera, ¿no?", ha revelado, admitiendo que "está bien que en el fútbol haya movimiento y venga alguien que agite la coctelera". Hablaba del Athletic, pero sirve igual para el Barcelona. "Un cambio les va a venir bien después de cuatro años. Y a mí, también".

Valverde ha reconocido que en la gestión de un equipo, sobre todo, "tienes que entender de personas porque los jugadores saben ver la autenticidad de la gente, eso es lo que valoran" y ha asumido que toma la decisión de abandonar el Athletic "en frío" porque estaba debatiendo consigo mismo. "La tomé en frío, si la hubiera tomado en caliente habría renovado por un quinto año. Al final se te recuerda por tu equipo". En ese sentido, ha debido interrumpir hasta en dos ocasiones su comparecencia de prensa para "beber agua y serenarme un poco".

"No me quiero tirar de presuntuoso, pero no es la primera vez que he tenido ofertas de clubs importantes, es así, no me cuesta admitirlo", ha precisado el entrenador que ha elegido el Barcelona para darle un nuevo impulso a su proyecto. Pero, de momento, y con el inmediato horizonte de la final de Copa del sábado, todo queda aplazado. "No, no tengo el corazón dividido. En mi casa me van a matar", ha dicho Valverde recordando que "deseo que gane el Barça porque supone mucho para mis jugadores y para mí".

De esa manera, el Athletic estaría la próxima temporada en la Europa League. "A mis jugadores siempre les decía: 'Tenéis que dejar el fútbol antes de que el fútbol te deje a ti'. Eso me ha pasado a mí en el Athletic. Pero hice valer mi idea inicial, pensaba que no podía quedarme aquí para complacer a la gente". Por eso, deja el Athletic. "Tengo 53 años, aunque aparento 43", ha afirmado bromeando antes de despedirse con "'eskerrik asko', de verdad, de corazón" para cerrar cuatro años en San Mamés en su segunda etapa. "Hasta el alcalde de Bilbao me pidió que siguiera, pero yo le dije: ¿'Cuántos años dura tu legislatura?¿Cuatro? Los mismos que yo'".