Un solitario gol del suplente Anthony Martial a ocho minutos para el final hundió en Old Trafford al Tottenham Hotspur (1-0), rival del Real Madrid el próximo miércoles en la Liga de Campeones, en un partido en el que los londinense extrañaron en exceso al lesionado Harry Kane.

La ausencia del máximo artillero ‘Spur’, con molestias en los isquiotibiales -es duda para el duelo de dentro de cuatro días en Wembley-, dejó a los de Mauricio Pochettino sin mordiente arriba y excesivamente dependientes de una genialidad de Dele Alli, Christian Eriksen o Heung-min Son (referencia arriba ante el United).

El preparador argentino introdujo tres cambios con respecto al equipo que goleó la pasada jornada al Liverpool por 4-1, y, además de la conocida baja de Kane, Pochettino dejó en el banquillo al colombiano Davinson Sánchez y a Kieran Trippier y apostó por Moussa Sissoko, Ben Davies y Eric Dier.