El Sierra Morena de 2017 será recordado por haber sido uno de los más disputados de las más ediciones y por pilotos jóvenes, que lucharon hasta el último tramo. En la primera etapa, disputada el viernes, el líder era Surhayen Pernía, con tres segundos sobre Iván Ares y nueve de ventaja con Cristian García. Ayer, con un día soleado se disputaron tres pasadas a los tramos de Trassierra-Ermitas, Cerrobejuelas y Villanueva Adamuz. En el primero de ellos se imponía Iván Ares con su Hyundai iI20 R5, colocándose líder con siete décimas sobre Pernía, pero en la primera pasada por Cerrobejuelas era Cristian García el que daba un auténtico “hachazo” con su Ford Fiesta R5, pues marcaba el mejor tiempo y sacaba doce segundos a Pernía, colocándose líder con cuatro segundos sobre el gallego. Pero los pilotos de Hyundai no estaban dispuestos a rendirse, y en el siguiente tramo, Villanueva-Adamuz, hacían los mejores tiempos y Pernía volvía a ser líder con solo cuatro décimas de segundo sobre García.
En la segunda pasada por Trassierra-Ermitas, el aragonés del Ford era el más rápido y se colocaba de nuevo primero de la general con cuatro segundos sobre Pernía, ventaja que aumentaba en otros diez en Cerrobejuelas 2, con el piso roto como los habituales que encuentra Cristian en su tierra. Quedaba el último tramo, y los dos pilotos de los Hyundai i20 arriesgaban, Ares deba un pequeño golpe y se retrasaba, perdiendo sus opciones de victoria, mientras que Pernía marcaba el “scratch” pero solo con cinco segundos sobre Cristian García, que iba a ser vencedor a su llegada a Córdoba con algo más de ocho segundos sobre su rival.
El podium final lo couparon tres jóvenes pilotos, que habían cambiado de vehículo para esta temporada. Por este motivo, el Campeonato de España ha ganado en emoción y especialmente en juventud.
La cuarta plaza final, a algo más de dos minutos con respecto al vencedor fue para los hermanos Burgo, con un Skoda Fabia R5 del que se esperaba algo más, mientras que la quinta fue para otros hermanos, los gallegos Sergio y Diego Vallejo, que no dudaron en pararse para ayudar a Iván Ares tras su golpe en el último tramo, junto con otros participantes. Un detalle de deportividad que dice mucho de todos ellos
En la categoría de Dos Ruedas Motrices, la victoria fue para Adrián Pérez, con un Suzuki Swift 1600, en el grupo R2 venció el cordobés Germán Leal con Ford Fiesta, mientras que el R3T fue para Javier Bouza con un Renault Clio. En las monomarcas, la victoria en la Copa Suzuki Swift fue para Esteban Vallín, con solo diez segundos de diferencia sobre Alfredo Tamés, mientras que en la Dacia Sandero Cup venció José Maria Reyes.
El Automóvil Club de Córdoba asumió un reto importante al organizar esta edición con dos etapas, acorde con el esquema del Trofeo Europeo de Ralis, pues significaba un esfuerzo mucho mayor. El resultado fue un éxito que resaltaron los participantes, al poder descansar entre una y otra y no ser toda la carrera en el mismo día. Quizás fue algo más incómodo para los espectadores foráneos, pues el viernes es día laboral y resultaba difícil para muchos estar ya en Córdoba a primera hora de la tarde. Pero la afición respondió masivamente, y con una colocación perfecta, como destacó Luis Climent, que volvía a las carreteras cordobesas pilotando el coche cero.
