El Atlético de Madrid cerró la jornada 25 a la misma distancia del liderato y con la misma ventaja en la zona de Liga de Campeones, pero dos puntos más lejos del Barcelona, segundo, y con una mínima renta sobre el Valencia, el equipo que pretende su tercer puesto y su rival del próximo domingo.

"Es un buen punto", resumió el argentino Diego Simeone, técnico del conjunto rojiblanco, al término del empate sin goles en Sevilla por su valioso efecto en la carrera por la Liga de Campeones, el objetivo primordial del Atlético para esta temporada, porque conserva su ventaja sobre el club andaluz, quinto, en ocho puntos.

Incluso, el marcador fue menos dañino del previsto en la pelea por la Liga. Ahí sigue el Atlético después de la igualada del Real Madrid, que encabeza la competición, frente al Villarreal. No ha variado su distancia respecto al liderato, siete puntos, y el empate "no cambia nada", según expresó Tiago Mendes, en referencia al objetivo del billete para la Liga de Campeones, aunque hay matices.

Uno es que el Barcelona, entre medias en la tabla de Real Madrid y Atlético, está dos puntos más lejos, a cinco, y otro, quizá el más transcendente hoy por hoy para el equipo rojiblanco, es que ya siente muy cerca al Valencia al acecho de su tercera plaza, de la que no se ha movido en las últimas catorce jornadas de competición.

Sólo un punto separa ya a ambos equipos, con el duelo directo del próximo domingo en el Vicente Calderón en la mente de ambos clubes y con la tercera posición en riesgo para el Atlético, que deberá modificar su once en ese choque en la defensa y en el ataque, con las bajas por cinco amarillas de Joao Miranda y Antoine Griezmann.

El uruguayo José María Giménez, en proceso de recuperación de una contractura en los isquiotibiales sufrida en el entrenamiento del pasado jueves, es el recambio natural del brasileño; Fernando Torres es la opción más probable para suplir al francés, con el croata Mario Mandzukic, suplente en Sevilla, de vuelta al once el domingo.

Si es así, ambos saldrían desde el principio como pareja de ataque en esta campaña por tercer encuentro. Antes lo hicieron en un triunfo (2-0 al Granada) y una derrota (2-0 en Vigo), además de que ya han coincidido sobre el césped en varios partidos, como en el derbi, con la asistencia del 4-0 de Torres a Mandzukic.

"Necesitamos de hombres como él (Torres), con su entusiasmo. Me ha encantado el entusiasmo con el que entró", destacó Simeone tras el duelo de anoche en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán sobre el delantero madrileño, suplente pero con minutos y ocasiones en los tres encuentros oficiales más recientes del conjunto rojiblanco.

A nivel colectivo, el Atlético, a la espera de recuperar las buenas sensaciones de todo el tramo anterior de la temporada, sobre todo en el aspecto ofensivo y como visitante, detuvo frente al Sevilla su dinámica de goles en contra a domicilio, al dejar su portería a cero lejos del Calderón después de siete partidos.

Desde la visita en la Liga de Campeones al Juventus (0-0), el 9 de diciembre de 2014, había recibido al menos un tanto en todas sus salidas. Y, desde la reanudación de la competición tras la Navidad, ha resumido sus desplazamientos en competición oficial con sólo una victoria (el 1-3 en Ipurúa al Eibar), dos empates y cuatro derrotas.

El Atlético, en comparación con la formidable temporada pasada, que concluyó como campeón, ha logrado seis puntos menos a estas alturas de Liga (54 de ahora por 60 en la jornada 25 en 2013-14). Hace un año estaba a tres puntos del líder, ahora está a siete, pero con el mismo objetivo: "competir al máximo hasta el último día".