El vizcaíno Jon Rahm (+3) y el castellonense Sergio García (+2), que llegaron en la lista de favoritos a Royal Birkdale, sede de la 146 edición del Abierto Británico de golf en la costa noroccidental de Inglaterra, han terminado por encima del par y lejos de los líderes provisionales, los estadounidenses Jordan Spieth (-8) y Matt Kuchar (-8).

"Hace falta mucha práctica en los links. Seguro que seguirá pasando, pero a ver si aprendo de ello", dijo Rahm, ganador hace dos semanas en el Abierto de Irlanda y número siete del ránking mundial en poco más de un año como profesional.

"Habrá que ver por qué cuando llega este punto de la temporada llevo dos años sin jugar bien y hacer los cambios necesarios", dijo el joven golfista de Barrika acerca de su segunda participación en el Open Británico, donde paso el corte por los pelos el año anterior.

Rahm tiene por delante unos días de descanso y varias semanas seguidas de competición en el Campeonato del Mundo en Ohio, el Campeonato de la Asociación de Profesionales de Estados Unidos, último grande de la temporada, y las series finales de la FedEx Cup, donde ocupa el quinto lugar y tiene claras posibilidades de embolsarse diez millones de dólares en la final de Atlanta.

Royal Birkdale tampoco ha dado tregua a Sergio García, decimonoveno de la FedEx después de ganar el Masters de Augusta en abril, que tuvo una semana "flojita" y no logró compensar el saldo acumulado en la primera vuelta.

"No me he encontrado cómo en ningún momento", dijo García, que participaba en su 74 grande seguido y su 21 Open Británico, donde se estrenó con 16 años en Royal Lytham and Saint Annes en 1996. Esta vez ha terminado en la mitad de la tabla de clasificación.

Cuando García preparaba las maletas para Austin Texas, su boda con Angela Akins, el grancanario Rafa Cabrera Bello, tercer superviviente español en Royal Birkdale, se mantenía empatado en el cuarto puesto a falta de siete hoyos.