Harrison Ford interpretaba a un abogado que tras un tiroteo sufrió amnesia y, en el proceso de recuerdo posterior, fue dulcificando su carácter. ¿Se acuerdan de la película? El título, sí, era A propósito de Henry. Ese sería uno de los múltiples guiones que se han escrito en los últimos días sobre la pérdida temporal de memoria de Fernando Alonso tras su accidente del día 22 en Montmeló.

El golpe de Alonso en la curva tres resultó de graves consecuencias porque "fue lateral", y no existe tanta protección "como el impacto frontal", según explicó Ron Dennis, jefe de McLaren. "Tiene una ligera amnesia temporal, pero eso es algo normal en estos casos", añadió Dennis. El protocolo de evacuación del circuito al hospital obliga a una sedación que, en sí misma, ya atolondra bastante.

"Fernando no se despertó hablando en italiano. Para empezar, no se despertó porque llegó consciente. Se dio un golpe fuerte, con las consecuencias que a veces derivan en cosas así", explicaba José Alonso, su padre.

René Arnoux, expiloto de Ferrari y Renault en los 80, aseguraba desde Ginebra que "lo peor para Alonso está por venir". Fabrizio Barbazza, un tipo que corrió 12 carreras de F-1 en 1991, afirmó sin temor a equivocarse que Alonso "recibió una descarga de 600 vatios", ni uno más, ni uno menos, "y que una descarga así (una plancha doméstica tiene una potencia de 1.000 vatios) provoca situaciones de amnesia de todo tipo". De ahí que empiece a hablar de ictus, tumores, ataques epilépticos-, que llegaron a provocar, incluso, que quien prepara ahora las demandas, su mánager Luis García, llegase a bromear sobre "la posibilidad de que fuese abducido por unos alienígenas". "Todo lo ocurrido resulta un poco inexplicable, pero es un asunto entre McLaren y Alonso. Y el equipo no quiere ni discutir sobre el accidente ni dar información", añadió ayer Bernie Ecclestone, patrón de la Fórmula Uno.

A día de hoy, las pruebas médicas realizadas solo pueden constatar que Alonso sufrió un golpe doble lateral en la cabeza de derecha a izquierda, fruto del cual tuvo un proceso de desorientación y pérdida momentánea de memoria. No hay ninguna prueba médica que detecte otros daños y los doctores han determinado que, en situaciones así, es mejor respetar el protocolo deportivo que se sigue, por ejemplo, en la Liga de Fútbol Americano (NFL) donde, a menudo, se producen algunos procesos graves de conmoción cerebral.

El cuadro de entrenamiento de recuperación sigue un patrón con este orden: reposo; ejercicio aeróbico; ejercicios sin contacto, entrenamiento con contacto controlado y, por último, participación completa en el entrenamiento. Alonso comenzó a entrenar hace una semana y sopesa seguir entrenando en Dubai, para buscar el buen tiempo y un horario próximo al de Malasia, donde quiere reaparecer.

Los médicos que atienden a Alonso en Asturias y el propio doctor de McLaren, Aki Hintsa, fueron quienes le aconsejaron no acudir a la primera carrera para evitar el "síndrome del segundo impacto", una precaución habitual que en F-1 han seguido muchos pilotos en los últimos años, entre ellos Hekki Kovalainen, que precisamente estuvo ingresado en el mismo hospital de San Cugat, también sin recordar nada del accidente con el McLaren en el 2008. Y volvió a las pistas siendo el mismo.