El Córdoba B cosechó ayer la primera derrota de la temporada, y sigue con el casillero de victorias a cero. El filial blanquiverde cayó derrotado en Marbella con un gol de Borja Rubiato en el segundo tiempo. El jugador local, que acababa de ingresar en el terreno de juego, fue determinante para que los costasoleños regalen su primer triunfo a la afición tras su regreso a Segunda B. Inicio de campaña con muchas dudas en los entrenados por José Antonio Romero, que deberán mejorar de cara al próximo compromiso frente al Granada B.
Empezó algo timorato el Córdoba B en el Municipal de Marbella ante un conjunto costasoleño que llevó la iniciativa desde los primeros compases. Sin embargo, el cuadro marbellí, recién llegado de nuevo a la categoría de bronce, se topó con una gran disposición defensiva del filial blanquiverde. Ello, unido al pésimo estado del terreno de juego condicionó el desarrollo de los primeros cuarenta y cinco minutos.
Fueron los locales los primeros en abrir las hostilidades en una gran ocasión. Sergio Narváez se escurrió entre líneas, asistió al hueco, pero Añón disparó desviado en el uno contra uno frente a Jon Villanueva. Inmejorable oportunidad de los anftriones que se iba al traste.
A medida que transcurrían los minutos el ´césped´ del Municipal marbellí iba empeorando, y con él el fútbol de ambos contendientes. En el minuto 23 una nueva ocasión para los locales en una acción por banda izquierda de Carlos Portero, pero el centro al área de éste no encontró un compañero que rematara la faena. Toscano despejó el peligro del área califal.
No se acercó el filial por el área de castigo del Marbella hasta el filo de la media hora. Estiraron líneas los cordobesistas y ello provocó un lanzamiento de Dani que, pese a parecer accesible para el portero Toni, el bote le complicó un poco la vida y éste se vio obligado a enviar el cuero a saque de esquina.
Apenas unos instantes después, los malagueños volvieron a la carga, de nuevo con Añón como máximo referente ofensivo. El disparo del atacante desde dentro del área lo repelió por bajo un atento Jon Villanueva.
Ya en el epílogo del primer tiempo, nueva aproximación peligrosa del Marbella. Carlos Portero penetra por la izquierda, cede al carril central donde José Hermosa estuvo excesivamente lento y permitió a la defensa del Córdoba B reponerse y evitar males mayores. Así, con el 0-0 luciendo en el tanteador se alcanzó el tiempo de asueto en la Costa del Sol.
Cambió algo el panorama tras el paso por vestuarios. José Antonio Romero movió su banquillo y apuntaló el centro del campo, buscando cerrar las vías de agua que había en su equipo. El cambio de David Álvarez dio resultado y se pudo ver a un filial más equilibrado, más compensado. El Marbella dejó de incomodar con asiduidad, aunque seguía llevando peligro cada vez que se asomaba por la zona de influencia de Villanueva. Precisamente el portero del filial volvió a resultar determinante en una acción frente a Añón.
El Córdoba B no se dejó amedrentar y también dispuso de buenas ocasiones para adelantarse en el marcador, la más manifiesta en una acción del rumano Florin. Buena acción coral del filial blanquiverde que Gabi Ramos evitó en última instancia que se convirtiera en el 0-1. También la tuvo Cristian Márquez acto seguido, pero el acertante no logró conectar un buen servicio de Moyano. Transcurrían los minutos y el equipo de José Antonio Romero se mostraba cada vez más cómodo sobre el césped del Municipal. Sin embargo, la entrada de Borja Rubiato cambió el aire al partido. El delantero, que ya resultó decisivo en la primera jornada, volvió a ver puerta a los cinco minutos de ingresar en el terreno de juego. Buen disparo de Rubiato y Villanueva que nada pudo hacer para despejar el lanzamiento. Corría el minuto 85 y el Córdoba B dio aún gracias de que el Marbella no lograra el segundo en el tiempo añadido.
