El presidente del Calahorra, Francisco José Montes, presunto autor de la agresión a un árbitro de 15 años en un partido de alevines, y el delegado del club, Francisco José Cerezo, a quien la denuncia le atribuye graves insultos, han sido citados para un juicio rápido de faltas el próximo martes, 23 de diciembre, por el juzgado de instrucción número 3 de Córdoba. Ambos recibieron ayer la citación judicial, un día después de que el árbitro pusiese la denuncia en la comisaría de Campo Madre de Dios.
Según explicó a este periódico Juan de Dios Carmona, el abogado de los dos directivos del Calahorra, a la vista de los hechos denunciados por el árbitro, el presidente deberá responder ante la justicia por una falta de lesiones, otra de amenazas y una de vejaciones injustas. Por su parte, el delegado del club, se enfrentará a una acusación de falta por amenazas y otra de vejaciones injustas.
Las multas por estas faltas no superarían los 200 euros, y 600 euros como máximo en la más grave, la de lesiones, donde la ley también prevé la posibilidad del arresto domiciliario. Así acabaría el recorrido judicial de un caso que ha causado un gran revuelo mediático en toda España.
La Policía Nacional ha resuelto el atestado en menos de 24 horas tras la presentación de la denuncia. Los agentes han trabajado en la identificación de las personas señaladas por el árbitro y en la toma de declaración a testigos del partido celebrado el pasado domingo, 14 de diciembre. Ese día, según la denuncia del joven árbitro, el entrenador le propinó un puñetazo en la cara al grito de "¡Te voy a matar!". Así se reflejó en el acta del encuentro, si bien finalmente el presunto agresor no era el entrenador, sino el presidente del Calahorra, que, según la denuncia, se hizo pasar por el técnico. En cualquier caso, en su investigación, la policía no ha encontrado indicios de delito.
Tanto el presidente del club Calahorra, Francisco José Montes, como el delegado del mismo, Francisco José Cerezo, insisten en que todos los hechos denunciados "son mentira" y mantienen su intención de querellarse contra el árbitro por injurias .
