El Córdoba llega justo a los minutos finales, pese a que en el último encuentro ante el Nástic de Tarragona parecía aguantar el punto. No obstante, el Córdoba ha encajado el 38% de los goles en los últimos 15 minutos. Al conjunto blanquiverde le han hecho 39 goles. Es el segundo equipo más goleado de la categoría, solo superado por el Mirandés. De esos 39 goles encajados, 15 han sido en los últimos 15 minutos, único tramo del partido en el que el equipo ha concedido dos goles.

Cuando menos goles reciben los blanquiverdes es recién llegados de la caseta tras el descanso. Tan solo dos goles ha recibido el Córdoba en ese tramo, con lo que las charlas de los técnicos dan resultado, al menos, mientras las fuerzas aguantan. Porque a partir de la hora de juego y en el último tramo de la primera parte de los partidos, cuando las piernas ya empiezan a pesar, son los tramos en los que los cordobesistas también encajan en exceso. Así, entre el minuto 30 y el 45 y del 60 al 75, el equipo ha encajado seis dianas, al igual que del 15 al 30.

Igualmente, el Córdoba no suele entrar tarde a los partidos. Tan solo ha encajado cuatro goles en los 15 primeros minutos.

DE LA PSICÓSIS

Curiosamente, hace casi un año que el entonces técnico del Córdoba, José Luis Oltra, ya hablaba de que los minutos finales en el Córdoba se convierten en una suerte de psicósis colectiva que había que evitar, a la vez que recordaba que los últimos minutos, tradicionalmente, se le daban mal al Córdoba.

Con el técnico valenciano al frente del primer equipo, se encajaron cinco goles en los últimos minutos. Sin embargo, con la llegada de Carrión le han hecho 10 en este tramo. Bien es cierto, como explicó Carrión en Valencia tras la derrota ante el Levante, que en no pocas ocasiones los suyos han encajado en ese tramo final al ir perdiendo y al verse obligado a volcar al equipo al ataque.

Dos partidos se perdieron en los últimos 10 minutos (ante el Sevilla Atlético y el Cádiz), mientras que en otros dos se logró puntuar: UCAM y Alcorcón.