A falta de menos de un mes para empezar la temporada, el Barça sigue dando retoques a la profunda remodelación de la plantilla. Cerrados los refuerzos en el centro del campo y en la delantera y la llegada del ansiado central, la secretaría técnica trabaja ahora con el objetivo de terminar la operación salida antes de intentar un último fichaje para la defensa.

Una operación salida que ha sido de lo más movida este verano en el Campo Nou: además del técnico (un Tata Martino que no estuvo a la altura del enorme reto) y del trotamundos Bojan, hasta nueve jugadores del primer equipo han abandonado el club este verano. Un éxodo masivo que no se recordaba desde el verano del 2008, cuando Pep Guardiola empezó a edificar el mejor Barça de la historia con hasta diez bajas.

De Deco a Cesc

Si el inicio de la era Pep estuvo marcado por el adiós de algunas de las vacas sagradas como Deco y Ronaldinho, en el de la era Luis Enrique destaca con luz propia el de Cesc Fàbregas. El centrocampista nunca respondió a las altas expectativas que había generado su regreso y ha vuelto a Inglaterra donde espera recuperar su mejor versión.

Los 33 millones que ha ingresado el Barça con su traspaso al Chelsea, unidos a los 42,5 obtenidos por el de Alexis al Arsenal, han servido para sufragar el fichaje de Luis Suárez.

La remodelación en el vestuario del Camp Nou ha sido de aúpa. Los tres porteros se han marchado y el capitán ha pasado del vestuario a los despachos. Mientras con Cesc y Alexis sí que logró un buen fajo, el Barça tan solo ha hecho caja por Bojan (al Stoke City por dos millones) y por Dos Santos (al Villarreal por la misma cantidad). Tello ha sido cedido al Oporto hasta el 2016 también por un par de millones mientras que Cuenca y Oier se han ido al Deportivo y al Granada después de haber obtenido la carta de libertad.

El Barça tenía dos cruces (Song y Afellay) y dos incógnitas más en su ecuación (Xavi y Alves). La primera incógnita se ha resuelto esta semana, después de que Xavi decidiera continuar en el equipo después de haber aparcado, de momento, las ofertas que tenía para ir a jugar a Catar y Nueva York.

La otra incógnita Alves, al que le queda un año de contrato, el club esperaba incluirlo en la operación con el Paría Saint Germain para el fichaje de Marquinho. Pero el club francés sigue sin querer desprenderse del central y, además, esta semana ha cerrado el fichaje de Serge Aurier, lateral marfileño que podría cerrar definitivamente las puertas a Alves.Mientras Alves, si se queda, lucharía por seguir siendo titular, Song y Afellay saben que no tienen sitio en el esquema de Luis. El pivote camerunés apenas ha contado con oportunidades desde que el Barça pagó 19 millones al Arsenal hace dos temporadas. La idea de Luis Enrique de devolver a Mascherano a su posición original de mediocentro vaticina que el papel secundario serña todavía más residual este año.

Canteranos con hambre

Afellay, que como Alves termina contrato en el 2015 y que entre lesiones y cesiones solo ha jugado 22 partidos los últimos tres años (2 con Martino), sabe que tampoco contará con opciones con el nuevo técnico.

De momento, tanto él como Song viajarán mañana a la concentración de Inglaterra, donde ocho canteranos con hambre (Patric, Ié, Grimaldo, Samper, Halilovic, Adama, Munir y Sandro) intentarán seguir ganándose la confianza de Luis Enrique.