Rafael Nadal mantuvo alto el nivel que le ha colocado como principal candidato a ganar Roland Garros este año el mismo día en el que Garbiñe Muguruza, defensora del título, se despidió con lágrimas en octavos de final y Pablo Carreño lloró de ilusión por alcanzar por primera vez los cuartos.

El nueve veces ganador sigue sin perder un set y ya está en cuartos, en los que se medirá con Carreño, un jugador que está completando la mejor actuación de su carrera. Su sonrisa, la de un joven de 25 años que descubre la mesa de los grandes, contrastó con la tristeza de una Muguruza que no pudo con la presión de ser la última ganadora y de una pista que, como en pocas ocasiones, se volcó con una francesa, Kristina Mladenovic.

Albert Ramos, por su parte, cayó frente al serbio Novak Djokovic por 7-6 (5), 6-1 y 6-3. Nadal prosigue su camino impertérrito hacia la semifinal, en la que, en teoría, le espera Novak Djokovic.

Frente a Roberto Bautista, ganó 6-1, 6-2 y 6-2 y está en cuartos de final habiendo cedido 20 juegos, uno más a estas alturas de la competición que cuando en 2012 firmó su actuación más brillante.

Un día después de cumplir 31 años y de haber festejado la duodécima Copa de Europa de su equipo, el Real Madrid, se clasificó por undécima vez para los cuartos de Roland Garros, igualando el récord del suizo Roger Federer.

Intratable, Nadal firmó su victoria 99 en partidos jugados al mejor de cinco sets sobre tierra batida y la 21 en esa misma superficie esta misma temporada, en la que ha ganado los torneos de Montecarlo, Barcelona y Madrid. Sólo perdió en Roma, contra Dominic Thiem.

Su buen momento lo sufrió un Bautista que jugaba sus segundos octavos consecutivos y que, de nuevo, volvió a toparse en esa ronda con el tenista en mejor forma, un año después de haberlo hecho frente al serbio Novak Djokovic.

Muguruza no pudo mantener el ritmo. La irregularidad que mostró tras ganar en París el año pasado regresó a su juego, en la olla a presión en la que el público convirtió la segunda pista en importancia del circuito para apoyar a Mladenovic, en cuya espalda Francia ha apoyado todas sus esperanzas para volver a ganar un Roland Garros 17 años después de que lo hiciera Mary Pierce.

La gesta del día la firmó un Pablo Carreño que venció al canadiense Milos Raonic, quinto favorito, por 4-6, 7-6 (2), 6-7 (6), 6-4 y 8-6, en el primer triunfo de su carrera ante un top 10.

En la que está siendo su mejor temporada, el tenista asturiano de 25 años, que ya se deshizo del búlgaro Grigor Dimitrov, demostró que tiene ante sí buenos años de tenis, aunque ahora se le presenta la difícil tarea de vencer a un Nadal contra quien ha perdido las tres veces que se han enfrentado. La jornada se cerró con la lógica derrota de Albert Ramos frente Djokovic. El catalán, finalista del pasado torneo de Montecarlo, plantó cara en el primer set, que se resolvió en el juego de desempate, y se aferró al partido en el tercero, pero la calidad del número 2, defensor del título, acabó por privarle de jugar los cuartos de final por segundo año consecutivo.

Hoy, Verdasco juega contra Nishikori y Carla Suarez se mide ante Simona Halep.