La raqueta está afinada, el golpe suena limpio y claro en las cuerdas de su babolat, Rafael Nadal tiene a tiro su segunda 'undécima' después de Montecarlo. Este domingo quiere conseguirla en su casa, en su pista, en su club, el Reial Club Tennis Barcelona y se hace dificil pensar que no lo consiga después de superar en las semifinales al belga David Goffin, número 10 mundial, especialista en tierra del que se deshizo por 6-4 y 6-0, en 82 minutos.

Nadal solo ha pasado apuros al inicio del partido cuando Goffin le ha sorprendido y le ha roto el saque en el primer juego y se ha colocado 2-0 en el marcador. A los 20 minutos el número 1 había encauzado la desventaja (2-2) para mantener un pequeño pulso que ha acabado en el décimo juego, rompiendo el saque de Goffin y apuntándose el set en 49 minutos. Goffin ha aguantado las acometidas de Nadal como podía. Intentaba jugar sobre las líneas, la única forma de sorprender a Nadal, pero la respuesta del mallorquín era para desesperar a cualquiera.

UN 6-0, DESCORAZONADOR

Y en la segunda manga Goffin ya no tenía ni la claridad de ideas, ni la condición física para aguantar el ritmo que le imponía Nadal. No le ha dejado ni ganar un juego más. En 33 minutos ha ganado el set y certificado ssu pase a la final, un año más, sumando 44 sets consecutivos ssin conocer la derrota en una pista de tierra y sumando la 400 desde que comenzó a jugar en el circuito. Solo el argentino Guillermo Vilas (659) , el español Manuel Orantes (502) y el austriaco Thomas Muster siguen por delante en esa clasificación, aunque hay un pequeño detalle en el que les supera de largo. Nadal solo ha perdido 35 partidos sobre esta superficie en la que ha ganado 54 torneos y este domingo, nadie duda, que ganará el 55 y el undécimo en Barcelona. ¿Quien da más?

¿La explicación? Nadal la tiene clara. "He conseguido adaptarme a la evolución del tenis actual y por eso sigo siendo competitivo", destacó en la misma central que lleva su nombre. De su rival, el griego Stefanos Tsitsipas, destacó que le vio en Montecarlo, que es "un buen jugador, agresivo, con buenos golpes y que, para ganarle. Deberé jugar al ritmo que lo he hecho hoy".