Lo que el martes era muy probable este jueves se hizo realidad. LeoMessi se sentará en el banquillo de los acusados, junto con su padreJorge Horacio, por defraudar 4,1 millones de euros al fisco entre el 2007 y el 2009. El árbitro del partido, en este caso el juez de Gavà Manuel Alcover Porvo, ha dictado la apertura de juicio oral tanto para el delantero como para su progenitor por tres delitos contra la Haciencia Pública.

La fiscalía había exculpado al jugador al entender que no tuvo conocimiento del fraude y solo acusa a Jorge Horacio Messi, para quien reclama 18 meses de prisión. El abogado del Estado, sin embargo, atribuye los tres delitos a padre e hijo y reclama 22 meses y medio de prisión a cada uno. La multa a la que se enfrentan superan los dos millones de euros. El juicio (no hay fecha todavía) se celebrará en un juzgado de Vilanova i la Geltrú.

En su auto, el juez considera que "existen elementos que permiten afirmar tantos que los hechos objeto del procedimiento y por los que se ha formulado acusación son constitutivos de varios delitos como que existen indicios de criminalidad respecto a ambos acusados". Como la fiscalía solicitó en su escrito de acusación solo penas de prisión para el padre del jugador y reclamó el archivo del proceso para Messi, el togado le ha dado ahora un nuevo plazo de tres días para, "si lo estima procedente", entregue una nueva calificación en la que figure como imputado el deportista, un hecho prácticamente improbable.

Y es que la fiscala Raquel Amado siempre ha mantenido que Messi desconocía la existencia del fraude a Hacienda. En su opinión, la intervención del delantero fue "puramente formal" y se limitaba a seguir las indicaciones de su padre, "en quien confiaba plena y ciegamente".

LA EXCULPACIÓN

Para la acusación pública, no ha quedado acreditado que el futbolista "participase en la toma de decisiones sobre la manera de canalizar los ingresos obtenidos mediante la explotación de sus derechos de imagen, ni que opinase o fuese informado al respecto". Tampoco conocía, según esta versión, que "existían o se utilizabanestructuras societarias exteriores específicamente articuladas para canalizar dichos ingresos de manera opaca y en condiciones adecuadas para defraudar" a Hacienda

La fiscalía entiende que el culpable de la defraudación a la Agencia Tributaria es el padre del jugador, Jorge Horacio Messi, quien si tuvo un papel "decisorio y decisivo" en la creación de la red financiera radicada en paraísos fiscales con la que presuntamente el deportista evitó tributar en España, que es su lugar de residencia. Es el progenitor quien, según la acusación, inició un "mecanismo defraudatorio".

El abogado del Estado, en cambio, sostiene que tanto Messi como su padre han cometido los tres delitos, en régimen de «coautoría» y, por ello, solicita para los dos una pena de 22 mesesy medio de prisión (siete meses y 15 días por cada unos de los delitos que se les atribuye). Y eso a pesar de que Messi ha depositado en el jugado los cinco millones de euros para pagar a la Agencia Tributaria. Por esta razón, precisamente, el juez de Gavà no fijadoninguna fianza como responsabilidad civil.

El magistrado tampoco ha acordado medida cautelar alguna y destaca que los dos acusados han mostrado "colaboración" en el proceso judicial y han abonado voluntariamente la totalidad de las cuotas presuntamente defraudadas.

NO HAY RIESGOS

En su auto, el juez asegura que "el carácter público" de los imputados dificulta "el extremo que pudieran sustraerse a la acción de la justicia", además de que "son conocidas las personas y entidades de las que obtienen sus ingresos, lo que reduce en gran medida el riesgo de insolvencia".

La Fiscalía de Barcelona se querelló inicialmente por fraude fiscal contra Messi y su padre y representante, Jorge Horacio, pero, tras la declaración del futbolista y del progenitor, se decantó por la exculpación del jugador, como ha quedado demostrado en su escrito de acusación. Y es que el padre del internacional argentino asumió ante el juez toda la responsabilidad en la gestión tributaria de su hijo, mientras que el deportista aseguró que todos sus negocios y asuntos económicos los controlaba su padre. El se dedicaba únicamente a jugar al fútbol.