LUIS MIGUEL CARRIÓN / REBASADO

Respaldado por el club, tiene un futuro corto y nada halagüeño

La posición de Luis Miguel Carrión es cada vez más insostenible. Pidió a los jugadores que le mostraran el respaldo del que se hablaba y el mensaje, en el Zorrilla, fue nítido. Se reunió en el palco del estadio blanquivioleta nada más acabar el encuentro con el propietario, su hijo, Álex Gómez y Cándido Cardoso, entre otros, porque de inicio llegó a estar incluso Alfredo Duro. Posteriormente, fue ratificado dentro del autobús por el propietario y si llega al encuentro del próximo domingo contra el Alcorcón, no será un momento nada agradable para él. Su Córdoba no termina de arrancar y a las deficiencias claras en el plantel se unen las tácticas. La separación entre líneas, la colocación y otros muchos aspectos no son de recibo.

CARLOS GONZÁLEZ / EL «PROYECTO» HACE AGUAS

Tuvo que confirmar a Carrión al no encontrar entrenador

Carlos González, propietario del Córdoba y persona que decide en el club -sobre todo en materia deportiva- bajó al vestuario en el descanso del encuentro contra el Valladolid para pedir «amor propio» a los jugadores. Luego, en el palco, montó una reunión para decidir el relevo del entrenador, puesto para el que se ha movido en los últimos días y por el que ya ha recibido dos negativas. A partir de ahí se abren todas las posibilidades. La plantilla está claro que no es para luchar por las eliminatorias de ascenso, objetivo que se había impuesto el propio club, y hoy podría regresar de nuevo a las posiciones de descenso. La búsqueda del relevo de Carrión continúa, aunque debe dar «el perfil» que busca el máximo accionista de la entidad.