Tal como él mismo dijo en rueda de prensa tras el partido que cerraba la campaña ante el Girona, «con mi media de puntos, 1,38 por partido, no daría para ‘play-off’».

De hecho, analizando las cifras de los partidos dirigidos por Luis Miguel Carrión, entrenador del Córdoba desde el 29 de noviembre del pasado 2016, se llega a la conclusión de que no mejora la media de la temporada.

El Córdoba ha acabado décimo en la tabla en la ya pasada 16/17 gracias a los 55 puntos sumados, ocho menos de los 63 que hicieron falta para entrar en la promoción de ascenso.

Con Carrión, el Córdoba ha sumado 36 puntos de 78 posibles, siendo el balance mucho mejor en casa que en los partidos disputados a domicilio.

En El Arcángel, Carrión ha logrado siete victorias en 13 partidos, con cuatro empates y dos derrotas. Lejos de la ciudad califal, sin embargo, solo se ha vencido en tres encuentros (el último, en Vallecas, tras seis meses de sequía sin ganar fuera). Los 11 puntos logrados fuera de casa (de 39 posibles) han sido una cifra pobrísima que ha imposibilitado cualquier intento del Córdoba por arrimarse a la zona alta.

En una clasificación que contase solo los partidos dirigidos por Carrión, el Córdoba habría acabado, igualmente, décimo. Sus 36 puntos dejarían a los blanquiverdes por debajo de Levante, Getafe, Tenerife, Valladolid, Cádiz, Girona, Huesca, Oviedo y Rayo por este orden, y empatado con el Gimnástic.