Berges vivió su peor tarde noche al frente del Córdoba CF. La peor de todas. Fue duro en sus explicaciones a los medios porque duro sentía el golpe de sus jugadores en otro partido para rumiar a solas. Partido, o lo que fuera. "Duró solo cuarenta y algo minutos", explicó en sala de prensa con cara de pocos amigos. "Ha sido desastroso para nosotros y nos vamos con una derrota merecida y pocas explicaciones. Cuando un equipo es mejor que otro solo queda irte para casa lo antes posible avergonzado y abochornado porque nos han ganado en todas las facetas del juego", añadió.

El análisis de Berges coincidió con todo aquel que lo padeció con un sentimiento blanquiverde. "Me ha sorprendido mi equipo, el Guadalajara sabía que es peligroso, apretaba en su casa, pero enfrente no ha tenido ningún rival. En este caso soy el máximo responsable del equipo y me siento parte de lo que es la imagen que hemos dado, que esta camiseta, este escudo y este club no se lo pueden permitir", dijo. Y se fue calentando pero sin alzar la voz. Más roto que alterado. Decepcionado en grado supino: "Es que venimos poniendo bastantes excusas fuera de casa y hoy no estaban Deulofeu, ni Jesé ni Morata y esas excusas se acaban. Hay que ser claros por nuestra parte. Fuera somos completamente diferentes que en casa y somos los mismos jugadores y las mismas caras y esto es un problema de mentalidad, de actitud, de compromiso, de todo".

"Cuando he estado en corners si no te rematan no te rematan. Las defensas tienen ventaja. Si en cada jugada, córner, acción te crean peligro no estás ni en la atención ni en la concentración necesarias para disputar un partido como veníamos hoy. Si ganábamos a cuatro del play off y en la lucha por pelear un sueño. Así es imposible. No se puede competir", añadió.

¿Ha dicho que le faltó compromiso a sus jugadores? Le espetó uno. "No sé lo que he dicho --con voz nerviosa--, es un poco todo. No hemos estado a la altura y punto. Cuando dos juegan y uno nada, primero, el entrenador se equivoca, y a la gente le falta lo que de verdad hay que tener para estar arriba. Tenemos calidad, jugamos bien pero somos blandos, flojos, poco intensos, relajados. Ahora mismo lo veo como el abrigo de ese señor, negro".