Un día después de conocerse que el Juzgado de Gavà había rechazado archivar la causa contra Messi por fraude, se producía un nuevo giro de guion en el culebrón Neymar. Horas antes de que Javier Faus presentara el balance económico de la última temporada trascendía que el socio Jordi Cases había ampliado su demanda por el fichaje del delantero brasileño pidiendo al juez Pablo Ruz la imputación del vicepresidente económico y de Bartomeu.

Faus aseguró que tanto él como Bartomeu están muy tranquilos y que, al igual que el presidente barcelonista, no se plantea dimitir en caso de ser imputado. "Mi valoración personal es que el tema procesal queda claro tras las declaraciones de Rosell, Rossich y el auditor de Deloitte. Tenemos absoluta tranquilidad y creemos que no hay tema, pero si Cases y su abogado tienen otros motivos es algo que se nos escapa", deslizó.

"Aquí no hay ninguna mano negra, sino algunas manos inútiles que han cogido el timón y están llevando la nave a la deriva", comentó a este diario el abogado de Cases, Felipe Izquierdo. El letrado explicó que había presentado esta ampliación para pedir la imputación de ambos directivos porque el socio quiere que Rosell, Bartomeu y Faus se hagan cargo de las multas o sanciones que se deriven de la sentencia que dicte Pablo Ruz y que dichos perjuicios económicos no recaigan ni en el club ni en los socios y para esclarecer por qué se firmaron tres contratos para fichar a Neymar.