El nadador mallorquín Joan Lluís Pons dio la sorpresa en la última jornada de los Europeos de natación de Glasgow al colgarse el bronce en los 400 estilos tras una gran actuación. Pons, que había sido finalista en esa prueba en los Juegos de Río 2016, se había clasificado en las series de la mañana con el sexto mejor tiempo (4.17.01), crono que destrozó en la final con una marca de 4.14.26, la segunda mejor que ha conseguido en su vida en esa compleja prueba que incluye los cuatro estilos.

Tras la experiencia de la mañana, ‘Joanllu’ y su entrenador arriesgaron en la carrera de la tarde. Pons salió a atacar desde el primer momento. En el paso por los 150 metros (mediada la espalda) es cuando el estilista mallorquín se puso tercero, lugar que no abandonó ya en ningún momento. Nadando por la calle 7, el español se mantuvo en esa plaza en los tramos de braza y crol que le hicieron subir al podio, solo por detrás del húngaro David Verraszto (4.10.65) y del británico Max Litchfield (4.11.00), y aguantando la embestida final del alemán Johannes Hintze (4.14.73).

Se trata de la segunda y última medalla conseguida por el equipo español de natación en línea en los Europeos de Glasgow, y se añade a la plata lograda por Jessica Vall en 200 braza.